Engordaderas en los bebés: qué son, por qué salen y cómo se tratan
Las engordaderas son un conjunto de pequeños granitos que aparece en la piel de los recién nacidos.
Normalmente, no suele picar ni molestar y, si todo va bien, desaparecerá a las pocas semanas de haber venido al mundo.
Si tienes hijos, muy probablemente sabrás lo que son las engordaderas. En el caso en el que estés esperando tu primer bebé, este es un buen momento para aprenderlo todo sobre el cutis del pequeño. Además, con toda probabilidad, tu hijo tendrá engordaderas al nacer. También denominadas milia o acné neonatal se trata de un conjunto de pequeños granitos que aparecen en piel de los recién nacidos.
Suele ser en la cara donde es más frecuente que aparezcan y, aunque también pueden encontrarse en otras zonas como la espalda o los brazos, no será tan común. Es importante tener claro que las engordaderas no le causarán ningún tipo de dolor a tu bebé. Tampoco pican ni se contagia.
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¿Por qué se producen las engordaderas?
El hecho de que este tipo de dermatitis aparezca en los primeros días de vida se debe a las hormonas maternas que ha recibido a través de la placenta e incluso a la acumulación de queratina. Estos dos factores son los principales causantes de este tipo de acné. No obstante, también hay que tener en cuenta que existen otros factores que apuntan a que las engordaderas aparecen debido a problemas y cambios hormonales que se suelen experimentar en los primeros días de vida.
Como ya hemos comentado, las engordaderas aparecen entre los recién nacidos y vienen a ser unas acumulaciones o erupciones, con apariencia de grano, que tienen un color blanco y que poseen un diámetro de unos dos milímetros. Cabe destacar que su forma es puntiaguda y que, sobre todo, se encuentran en la nariz, las mejillas y la frente. En algunas ocasiones es posible que se confunda con la dermatitis atópica, pero que es muy diferente. Las engordaderas son depósitos de grasas y de queratina y tienen un aspecto de granitos. Por su parto, la dermatitis atópica se trata de una superficie de la piel enrojecida.
¿Cómo se tratan?
Para tratar las engordaderas, lo primero que tendrás que hacer será que no debes apretarlas ni estrujarlas. Además de hacer daño al niño, provocarás que se infecten. También, es muy importante tener claro que, por regla general, suelen desaparecer por sí solas en las primeras semanas de vida.
Por ello, no tendremos que preocuparnos y no se tendrá que llevar a cabo un tratamiento específico para conseguir que desaparezcan. En el caso de que veas que tu hijo tiene engordaderas podrás seguir unas recomendaciones. Lo mejor será llevar, día a día, una buena higiene del bebé, empleando agua y un jabón específico para la edad de los niños, es decir, que sea PH neutro.
Tampoco habrá que manipular, bajo ninguna circunstancia, los granitos y menos aún hacerlo con las manos sucias o no desinfectadas. Esto le podría causar una importante infección al bebé, que sería mucho grave que en lo que en sí tiene. Si ves que las engordaderas le están causando cierto malestar o picor al bebé lo más conveniente será poner una compresa de agua fría sobre la zona, para que calme el dolor. Si la cosa va a más, podrás considerar llevarle al especialista.
Aspectos más importantes sobre las engordaderas
Además de todo lo comentado, hay que tener en cuenta diversos datos sobre las engordaderas. Si los granitos aparecen en zonas como el paladar o las encías pasará a llamarse perlas de Epstein. Este tipo sí que podrá tener alguna complicación y tardar más en desaparecer. Si se diera el caso en el que las engordaderas no acaban de irse pasado un mes de vida o estas empeoran lo mejor será acudir al pediatra.
Aunque ten en cuenta que casi la mitad de los recién nacidos se ven afectados por este tipo de granitos. Por regla general, suelen desaparecer sin dejar ningún tipo de marca. Hay algunos padres que confunden las engordaderas con la costra láctea, pero esta es una dermatitis que se presenta bajo la apariencia de costra blanca o amarillenta.
Es más habitual que los niños sufran engordaderas, tanto es así que muchos varones verán afectadas varias zonas de su cuerpo e incluso alguna parte de los genitales como el prepucio. También, resultan más proclives a sufrir de este tipo de acné neonatal aquellos bebés que han pasado tiempo en una incubadora después de nacer.
Lo mismo les sucede a aquellos que han contado con vendajes por distintos motivos o los que han nacido en un clima cálido. A grandes rasgos estos son los datos que tienes que conocer si tu hijo nace con engordaderas. Como ya hemos comentado, se trata de un tipo de acné que no muestra ninguna complicación y que desaparecerá al cabo de las pocas semanas.