Sara Sálamo: "Cuando fui madre me enfadé porque en clase nadie me enseñó a usar las tetas"

Sara Sálamo se inició en la maternidad el 11 de julio de 2019 con el nacimiento de Theo, su primer hijo junto a Isco Alarcón. Antes incluso de llegar a tener en brazos a su primogénito, la intérprete utilizaba su Instagram como altavoz para destapar la cara B del embarazo, algo que fue agudizándose aún más durante el posparto. La autora de ‘El ocaso del mono que arañaba la pared’ desmontaba con cada una de sus declaraciones la falsa idea de que “estás estupenda” tras dar a luz y se centró en visibilizar una realidad que no es “elegante ni glamurosa”.

La actriz es la invitada del próximo domingo de ‘Estirando el chicle’, el podcast conducido por Carolina Iglesias y Victoria Martín, donde hablará sin tapujos sobre las luces y sombres de la maternidad. En el adelanto de este programa, Sara relata cómo toda la ropa le quedaba “fatal” nada más tener a su niño. “Cuando estás embarazada, todavía la tripa es dura y la tela cae de cierta forma. Pero cuando se va el niño, se te queda la misma barriga pero eso es blando”.

Una secuela posparto que se sumaba al “chute hormonal que tienes que estás totalmente desquiciada, o yo por lo menos lo estaba”. Sálamo reconoce que en esa época la rabia invadió su cuerpo porque se dio cuenta de que no estaba formada en el tema. “Estaba muy enfadada con que nadie me hubiese contado eso y con haber estado en clase millones de años y me explicaran cómo funciona el intestino y no me enseñaran a usar las tetas, por ejemplo, porque para dar de mamar hay posturas con nombre o que tienes que vaciar los cuatro cuadrantes para que no te de una mastitis y no te suba fiebre”, no ocultaba su indignación.

Sara lleva luchando públicamente contra los comentarios de odio que recibe en redes desde que se dio a conocer al público. Hace unos días, la actriz volvía a denunciar los ataques machistas de los que estaba siendo víctima tras publicar un vídeo en el que aparece dando de mamar a su bebé. “Nos estamos pasando todos los niveles del tetasutra”, bromeaba la intérprete horas antes de verse obligada a borrar el clip.

"Había subido un vídeo alimentando a mi hijo. Donde no se veía nada. Ni medio pezón. No pensaba que se utilizaría para crear uno de los hilos más misóginos y machistas del mundo", hacía referencia al hilo que un usuario creó en Twitter, por el que recibió cientos de insultos. “Me estaba costando no vomitar mientras escribía al leer semejantes burradas", denunciaba esta alarmante situación.