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Ver a Sinem tan decidida a la hora de pedir el divorcio ha destrozado a Emre. Además, se siente acorralado ante la presencia de un Ateş que le presiona para que firme los papeles lo antes posible. Cuando lleva a Bahar al acantilado su objetivo es que el abogado sufra de la misma manera que él está sufriendo, pero pronto se viene abajo al escuchar las palabras de Bahar: “Ya está bien. ¿Qué crees que pasará, qué vas a conseguir tirándome? ¿Crees que así volverá contigo? No y será mucho peor. Así la vas a perder para siempre. Aún no has estropeado nada. Ella también te quería y todavía te quiere, pero tú no se lo has puesto fácil. ¿No ves que ahora lo único que siente es miedo? No dejas que nadie se te acerque y mucho menos que te quiera. Podríais volver a empezar”.

En el próximo capítulo de ‘Me robó mi vida’ veremos cómo afecta este dramático episodio a la vida de Bahar. Además, seremos testigos de la nueva vida de Efsun, ahora que ha decidido olvidarse de su familia biológica.

Que la pareja quería casarse desde hace tiempo era un hecho, sin embargo, la llegada de Mücella ha precipitado los planes y en cuestión de dos días tiene lugar el esperado ritual en Gelincik. Ante la ausencia de la tía de Ateş, es su socio el que intercede por él para pedir la mano de la joven. Nuran asiste atónita ante la rapidez con la que se ha organizado todo, pero İlyas lo tiene más que claro, el lugar de Bahar está junto al abogado.

Efsun observa desde fuera cómo su hermana consigue ser feliz mientras ella se encuentra dividida entre dos mundos sin llegar a pertenecer a ninguno de ellos. Parece que su historia con Ismail podría tener futuro, pero Nuran se ha encargado de quitarle toda la ilusión. Además, que su propia madre no le haya avisado de la pedida de mano de Bahar marca un antes y un después para Efsun, que decide cortar cualquier tipo de relación con ella, con İlyas y con Bahar.

La felicidad de la pareja por haber oficializado su relación apenas dura unas horas. A la mañana siguiente, se encuentran en la posada fotografías y un retrato de Bahar ensangrentado. Está claro que alguien está yendo a por ellos. La primera persona que se le pasa por la cabeza a la joven es Onur, que sigue sin pasar página. Sin embargo, Sinem informa a Ateş de que su todavía marido, Emre, ha estado en tratamiento psicológico y tiene conductas peligrosas en situaciones límite. Efectivamente, sus sospechas se confirman cuando Sinem y el abogado acuden al lugar dónde comenzó la historia del matrimonio, en el acantilado, donde Emre sujeta a Bahar al borde del precipicio.

Mientras Bahar se encuentra en una situación límite, el matrimonio de Mehmet Emir y Fulya se ha terminado de romper. El empresario ya le ha confesado a Hasret sus sentimientos por ella y el comportamiento obsesivo de Fulya le ha terminado de confirmar su decisión: se va de la mansión. Edibe ha ordenado a Hülya que interceda en el matrimonio, de lo contrario, Mehmet Emir se alejará de los Atahan todavía más y pondrá más poder en manos de Efsun. ¿Conseguirá Edibe que el matrimonio haga las paces? ¿Dará Hasret un paso adelante y reanudará su historia de amor? Si quieres descubrirlo, no te pierdas lo nuevos capítulos de ‘Me robó mi vida’. De lunes a viernes a las 23:00 horas, en Divinity.

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