Los trucos de estilista para llevar un ‘naked dress’ con elegancia
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Los ritmos de la moda se mueven a un ritmo que en muchas ocasiones es mucho más rápido de lo que podemos asimilar, pero también es cierto que cuando una tendencia triunfa, puede durar varias temporadas y seguir cosechando tanto éxito como el primer día. Es el caso del ‘naked dress’, o lo que es lo mismo y haciendo alusión a la traducción de su nombre, los ‘vestidos desnudos’, un diseño que ha enamorado a las celebrities a ambos lados del charco y cuya presencia cada vez está más presente en el Street Style.
Aunque parezca muy novedoso, lo cierto es que sus orígenes se remontan a principios de los años noventa de la mano de John Galliano y Versace. Ya se sabe que la moda es cíclica y allá por 2018 comenzó a verse tímidamente en algunas alfombras rojas de la mano de Zuhair Murad o Elie Saab en diseños que parecían sacados de una película. Este año una de sus mayores embajadoras es Maria Grazia Chiuri, directora creativa de Dior, y Fendi (que además se ha encargado de vestir a Beyoncé con este tipo de prendas en su gira. Otras firmas que lo trabajan mucho son Alexander McQueen, Celine, Stella McCartney, Jean Paul Gaultier o Roberto Cavalli.
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Volviendo al modo en el que lucirlo, el problema surge ya no solo a la hora de atreverse, sino en el momento de combinarlo, pues estos modelos muy discretos no son: transparencias, encajes, brillos… Todo tipo de detalles para mostrar la piel sin miedo de una forma sugerente gracias a la cual la mujer que lo luzca se sienta empoderada.
En Divinity hemos consultado a un experto en la materia, el estilista Jesús Reyes, para que comparta algunos consejos para incorporarlo al vestidor y acertar. "Está claro que los ‘naked dresses’ están causando furor y también a mí me parecen una propuesta súper especial. Tan especial como arriesgada. Para llevarlos con acierto, desde mi consejo, está el de lucirlo para ocasiones festivas y no ceremoniales. Es decir, apuesta por un ‘naked dress’ para una noche de fiesta, para una cena con amigas, para un evento de verano o cumpleaños”, explica.
A la hora de combinarlo, aboga por los zapatos que alarguen la pierna para que la silueta se vea lo más definida posible. “Opta por unas sandalias con buen tacón, que estilizan mucho la silueta y figura. Como alternativa también unos salones o stilettos destalonados -también con más de 10 cm de altura-. Las que quieran añadir una dosis de color, que no tengan miedo, el contraste será todo un acierto”.
Continúa diciendo que “Los ‘naked dress’ de pedrería y brillo me fascinan. Si te haces con uno, rebaja los toques de accesorios y joyas. Si el vestido no lleva brillo, entonces sí apuesta por joyas XXL y un bolso de rafia, boho-chic y handmade, muy en tendencia, te darán ese toque cool y trendy".
Jesús concluye sus claves haciendo referencia a la gama de color. “Los diseños en tonos con personalidad como el naranja, el amarillo o el verde resultan perfectos para todas aquellas que quieran apuntarse a la tendencia sin llevar un estilismo ‘de princesa’, sino algo más rompedor”.
No hay que olvidar tampoco que para lucir estos vestidos, hay que estar completamente segura de que la prenda se adapta completamente a nuestros gustos y que nos sentimos cómodas con ella. La actitud lo es todo.