Mary Donaldson aparecía en el balcón junto a su marido, el ya proclamado rey Federico X, para saludar a la multitud que se agolpaba en el balcón de Christiansborg tras una ceremonia sencilla y muy alejada de la pompa con la que Carlos III de Inglaterra sucedió a su madre.

Federico X y Mary han saludado a su pueblo, y han demostrado el buen momento sentimental que atraviesa la pareja, primero agarrados de la mano y a continuación con un apasionado beso con el que han querido alejar todo tipo de rumores sobre la posible crisis que atraviesa la pareja.

Mary ha elegido un abrigo-vestido de color blanco de inspiración nupcial, con el que ha lucido algunas joyas históricas, un broche sujeto al cuello del vestido, otro en el cinturón y unos pendientes con mucha historia.

El vestido elegido por Mary Donaldson es un diseño blanco de inspiración nupcial, un modelo de corte fluido, manga larga ceñida y cintura ajustada de la que parte un detalle plisado que recorre el cuerpo hasta llegar a transformarse en un cuello fular. Un modelo con el que la reina consorte ha querido hacer un homenaje a la moda danesa.

El vestido es una creación de Soeren Le Schmidt, uno de los diseñadores favoritos de la australiana y responsable del comentadísimo vestido rojo con el que dio la bienvenida al año en 2018. El modelo ha sido confeccionado en el taller de Brigitte Hallstein, el mismo que fue elegido para crear el vestido de novia que diseñó para la ya reina consorte Uffe Frank.

De las joyas que ha elegido Mary para la coronación de su esposo hay dos que destacan por encima de todas. Se trata de un broche y unos pendientes que pertenecen al conjunto de rubíes, del que también forma parte una tiara que hoy no ha lucido Mary Donaldson, que la reina Ingrid dejó en herencia a Federico para que pasaran directamente a manos de su esposa.

Sobre el uniforme de Federico X, se esperaba que rompiera con la tradición marcada hasta ahora en la corona danesa de vestir de negro en su coronación. Hasta ahora, el acceso al trono ha sido consecuencia del fallecimiento del anterior monarca, razón por la que a lo largo de los siglos quien accedía al trono guardaba luto por el fallecimiento del anterior monarca.

Hoy no se daba esa circunstancia y se especulaba con la idea de que Federico eligiera otro color para su coronación como rey del pueblo danés. Sin embargo, finalmente ha optado por el uniforme de gala siguiendo el estricto protocolo que marca la corona.