Cuando llega el otoño y el invierno, las tendencias en colores y estilos cambian de manera radical. Para esta temporada 2024/2025, la paleta de colores ha cambiado hacia unos tonos cálidos, profundos y más sofisticados, los que han quitado el protagonismo a colores que veíamos en temporadas anteriores. Éstos se pueden aplicar tanto a prendas de ropa como complementos como joyas que van a elevar tus looks.

Estos tonos tan típicos de la primavera como el lila, rosa o celeste suave han sido dejados a un lado en esta temporada otoño-invierno 2024-2025. Estos colores añaden un toque romántico a los looks, pero esta temporada las tendencias se inclinan más hacia los tonos más oscuros que encajan a la perfección con la época fría que está llegando.

Un color que sí vamos a ver es el rosa empolvado, un color que da mucho juego con texturas y que veremos en prendas y complementos de todo tipo. De todos modos, estos colores se pueden adaptar a las tendencias con detalles sutiles como en accesorios o en capas debajo de tonos más neutros. Así, le podrás dar un toque personal a tu outfit y seguirás llevando un look en tendencia.

Estos colores los hemos visto en la temporada anterior, son colores muy veraniegos y que se ven continuamente en festivales de música que se celebran en la época estival. Pero ahora, se marchan para dejar paso a colores más oscuros y naturales.

Esta temporada se evitan los tonos extremadamente brillantes como son los neones, y se va buscando más la elegancia y la armonía a la hora de crear un look. A la hora de integrar estos colores, se puede hacer mediante los accesorios. Utilizando una base neutra o en tonos terrosos se puede añadir un toque neón con accesorios como bufandas, guantes o bisutería. La idea es aportar un toque de chispa pero sin romper la armonía del look.

Podemos pensar que el blanco es un básico en cualquier armario, y es cierto, pero con matices. Esta temporada se verá más un blanco crudo, más tirando a un tono crema que un blanco puro y frío.

Los tonos de blanco crudo aportan una suavidad y armonía mucho más acorde con las tendencias otoñales que la que transmite una prenda en un blanco más puro. Además, los tonos crudos encajan a la perfección con las tonalidades que están en tendencia.

Si tienes prendas blancas que quieras seguir usando, puedes combinarlas con piezas en tonos grises neutros o marrones claros para que estos puedan reducir el impacto que tiene la prenda blanca pura, y así puedes conseguir un look ideal.

Al igual que los tonos neones, los amarillos cítricos esta temporada abandonan nuestro armario para dar paso a otros tonos más neutrales. Por ejemplo, un amarillo mantequilla, un tono que está entre un beige y un amarillo pastel o un tono mostaza profundo serían colores que se van a ver en tendencia. Estos son ideales para darle un aporte de color a los looks.

Por otro lado, el azul hielo o el gris plateado tampoco son tonos que vayamos a ver este otoño-invierno, a pesar de que sí que vamos a ver muchos azules y grises. Estos tonos extremadamente fríos, que nos recuerdan a un estilo más industrial, dejan paso a otros más neutrales y naturales.

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