El siete de diciembre era la fecha marcada en el calendario para que Alonso Aznar, el hijo pequeño de José María Aznar y Ana Botella contrajera nupcias con la fotógrafa mexicana Renata Collado. Acompañados por una lista de célebres invitados los novios se dieron el 'sí, quiero', pero todavía son pocos los detalles que han transcendido de esta velada. Lo que sí conocemos es el look que escogió Tamara Falcó para acudir a la ceremonia, una elección que puede despertar controversia, pues no se adecua a una de las reglas universales para las invitadas.

La marquesa de Griñón ha compartido una instantánea a través de sus cuenta de Instagram en la que aparece acompañada de su marido, Íñigo Onieva. En la fotografía ambos aparecen ya vestidos para la ceremonia y llama especialmente la atención el estilismo de ella, que ha contado con la ayuda de la estilista Almudena Carnicero, quién ha trabajado también con otros rostros conocidos como Carolina Adriana Herrera y Garbiñe Muguruza.

Para esta cita la hija de Isabel Preysler ha escogido una falda roja estilo princesa realizada con tejido estructurado y ajustada en la cintura mediante un fajín de color naranja y con volumen, que caía hasta los pies, firmada por TFP by Tamara Falco para Pedro del Hierro, la colaboración que ella misma mantiene con la marca dirigida por Nacho Aguayo. La ha combinado con una blusa blanca que recordaba a la artesanía típica de país donde ha tenido lugar la boda. Es una prenda de escote en pico con manga media y un patrón de calados en la zona del pecho y los hombros que es el detalle más especial. Ella la lleva metida por dentro de la falda de forma que se destaca su cintura.

Sin embargo, la prenda superior llama la atención por otro motivo y es que está diseñada en color blanco, un tono que los expertos en protocolo desaconsejan por completo para las invitadas a este tipo de eventos. Y es que el blanco y todos los colores que se le puedan parecer (beis, amarillo y rosa muy palo, etc) están reservados únicamente para la novia. Esta prenda, pertenece a la misma firma que la falda, pero ambos diseños no aparecen ahora mismo en la web de la marca, por lo que todo podría apuntar a que son diseños de la nueva colección.

El toque más divertido del look Tamara lo introdujo a través del bolso pochette. Pues podría haber elegido uno de color rojo o en un tono neutro, como el negro o el beis, pero decidió arriesgar e introdujo un bolso de mano estampado en tonos negros y crema confeccionada en terciopelo arrugado, un tejido que tendrá especial presencia durante la temporada festiva este 2024. Este complemento pertenece a la firma Double J y en su web destacan la doble funcionalidad del artículo: "Es perfecta para organizar pequeños artículos en un bolso más grande, pero también queda de maravilla como bolso de mano". Precisamente de esta última forma es como lo lleva Tamara, aprovechando la cinta de tejido que atraviesa una de sus caras para sostenerlo. Este artículo está ahora mismo disponible y se puede adquirir por 180 euros.

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