Hay bolsos que han trascendido a las modas y las tendencias para llegar a convertirse en auténticos iconos de la historia. Son modelos tan deseados, que en ocasiones han alcanzado incluso el estatus de pieza de colección. Hermés, Chanel, Dior, Fendi, Loewe o Louis Vuitton son algunas de las firmas que han dado vida a algunos de los mejores bolsos de lujo de la historia, bolsos que se siguen reeditando y agotando año tras año.

Algunos, como el Birkin o el Lady Dior, fueron bautizados con el nombre de la musa que inspiró a su diseñador, otros alcanzaron la fama gracias a la confianza de mujeres de todo el mundo, como le ocurrió al Amazona o al Neverfull, y una tercera categoría de bolsos se popularizó por haberse convertido en el favorito de algunas celebridades, tanto reales como Grace Kelly y Jackie Kennedy, es el caso del Kelly y el Jackie 1961, como ficticias, como Carrie Bradshaw, que lanzó al estrellato al bolso más icónico del estilo Y2K: el bolso baguette de Fendi

Su nombre es una referencia literal a la imagen del pan francés, por su forma alargada y el asa corta que obliga a llevarlo como una baguette bajo el brazo. Hay que remontarse a 1997 para encontrar el origen del bolso baguette, pero su verdadero éxito se debe a que se convirtió en uno de los favoritos del personaje que interpretaba Sarah Jessica Parker en ‘Sex and the city’.

Tres décadas después el bolso baguette vuelve a vivir un momento de gloria, triunfando no solo de la mano de Fendi, la firma que le dio vida, sino también de las nuevas versiones creadas por marcas como Prada, Versace o Michael Kors y gracias al respaldo de famosas, prescriptoras e influencers, que han encontrado en este modelo al nuevo icono de estilo al que rendir pleitesía a través de las redes sociales.

Rosalía, que tiene un don especial para adelantarse a las tendencias más virales, anticipaba la ‘era baguette’ con un divertido post de Instagram en el que posaba con una auténtica baguette de pan metida en una preciosa y delicada bolsa de organza de la tienda parisina Brigitte Tanaka.

Pero más allá de este anecdótico símil, que levantó pasiones entre sus fans y con el que realmente buscaba manifestar su compromiso con el medio ambiente y llamar a la concienciación sobre el uso de bolsas de plástico, Rosalía ya había caído en las redes de un bolso baguette firmado por Balmain. Pudimos verlo en un posado en el que combinó un total look con el logo de la marca, compuesto por unas mallas de ciclista y un microtop de manga-guante y hombreras pronunciadas y claramente se apuntó un tanto, porque este tipo de bolso se ha convertido en la pieza más buscada entre famosos de todo el mundo.

El bolso baguette, especialmente el firmado por Fendi, que por llegar el primero tiene un lugar de honor en los libros de moda, es uno de los modelos favoritos de nombres como Sarah Jessica Parker, Jacob Elordi, Zoe Kravitz, Zendaya, Emma Roberts, Amanda Seyfried, Bella y Gigi Hadid, pero no está solo, también triunfan esta temporada las versiones creadas por otras marcas.

Fiel a Fendi, la actriz Sarah Jessica Parker optaba en la ceremonia de apertura del Festival de cine de Turín, celebrada el pasado mes de noviembre, por el bolso baguette ‘Wangloc’ de Alexander Wang, un modelo de asa plana con apliques de cristal.

Quien también ha lucido varios modelos de Fendi es Gigi Hadid, aunque en ocasiones la hemos visto llevando el baguette ‘Arcadie’ grande de Miu MIu, un bolso de asa redonda con logo en una de sus caras y herrajes en tono dorado.

Bella Hadid también lleva un tiempo obsesionada con los bolsos tipo baguette. Los ha llevado de diversas marcas y una de sus últimas adquisiciones ha sido el 'Cilinder' de Prada, un bolso bicolor con el amarillo mantequilla como protagonista, confeccionado en piel perforada.

Gala González es otra de las que se ha apuntado al bolso tipo baguette, en su caso ha optado por uno de los modelos ‘Bamboo’ de la colección que ha presentado Gucci para el próximo otoño/invierno.

Finalmente, la apuesta de María Fernández Rubíes ha sido un bolso tipo baguette 'vintage', un modelo de Louis Vuitton, en concreto el ‘Monogram Denim Papillon Denim Blue’, que la firma lanzó en 2005, cuando Marc Jacobs era director creativo de la firma.

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