Collares, colgantes, anillos, pulseras…, las joyas están entre los complementos masculinos más deseados para aquellos hombres que buscan diferenciarse con su estilo a través de los detalles.

Si hace ya tiempo que los anillos y las pulseras consiguieron posicionarse como complemento masculino sin demasiadas complicaciones, posiblemente porque la joyería se adaptó a sus gustos con diseños lineales y sobrios, ahora le ha llegado el turno a los collares y colgantes y lo cierto es que, junto a los modelos discretos, entre las tendencias se han colado otros muy llamativos.

No solo las pasarelas han sido las responsables de este cambio de actitud, también muchos deportistas, actores y cantantes de rock, pop, punk, rap, hip-hop y reggaetón, que actualmente son considerados como auténticos referentes estéticos, han conseguido tumbar los antiguos estereotipos que identificaban los collares como un complemento estrictamente femenino.

El colgante en forma de candado es una de las apuestas más firmes de la temporada. Ha recibido el respaldo de firmas como Givenchy, Ambush, Hatton Labs o Northskull y el de cantantes como Yungblud. Puede ir colgado a modo de charm en una cadena de tamaño medio o servir de cierre para las de eslabones más gruesos.

Una cruz sin más no tiene nada de novedoso, pero los colgantes en forma de cruz que se han convertido en tendencias no tienen demasiado que ver con ellas. Según propones firmas como Dolce & Gabbana, Gucci o Dsquared2, se trata de cruces en formato XL o con aplicaciones de piedras y cristales que las convierten en piezas de diseño.

Colgantes con caras y máscaras han conseguido elevarse a la categoría de tendencia gracias al empujón de Travis Scott, que es fan absoluto de las joyas XXL, siendo de diseño propio muchas de las que luce. Sin tanto exceso, hay firmas que se han apuntado a este tipo de charm como Versace y sus medusas, Alexander McQueen y sus calaveras o Emanuele Bicocchi y las monedas con la cara del César.

Tras muchos años en la sombra, la logomanía ha vuelto a hacer furor entre las tendencias de la temporada tanto en la ropa como en los complementos según las propuestas de Prada, Gucci, Vetements o Dolce & Gabbana. Los colgantes con logo son para las firmas un reclamo publicitario y para quienes los lucen, un símbolo de estatus, aunque en muchas ocasiones no se trata más que de colaboraciones a las que están obligados por contrato.

Llevar colgado el signo del zodiaco es otra de las tendencias por la que apuestan firmas como Nymos, Thomas Sabo o Viceroy, que han elegido la manera tradicional de llevarlos a la joyería, pero también hay marcas como Pragnell que han creado para los más atrevidos divertidos charms con las imágenes del horóscopo chino.

Este verano asistimos al resurgir del smiley, esa carita sonriente que volvió del pasado para adornar prendas de vestir y piezas de bisutería en su mayoría creadas en plástico reciclado. Este emoticono sigue en auge y ahora ha pasado a formar parte de las piezas de joyería más deseadas.

Quienes busquen detalles sin un significado especial, tienen a su disposición un amplísimo catálogo de colgantes y collares decorados con figuras geométricas. Basta con elegir el material y el tamaño favorito para conseguir una pieza que de un plus a cada uno de tus looks.

En cuanto a los collares, es indiscutible que una de las tendencias más claras de la temporada son los collares de eslabones y si pueden ser de tamaño XL, pues mucho mejor. Se llevan solos, a puñados e incluso combinados con algunos o varios de los colgantes que están de moda.

Desde que Harry Styles los elevara a la categoría de accesorio masculino, los collares de perlas se han convertido en una de las piezas clave de los estilismos más rompedores. Uno de los que se ha sumado a la tendencia sin oponer ningún reparo es el cantante Machine Gun Kelly, que apuesta incluso por las gemas de mayor tamaño en formato gargantilla para acompañar a algunos de sus poco previsibles estilismos.