Las mangas abullonadas siguen siendo una de las tendencias más apetecibles del verano. Se recuperaron de los años ochenta hace varias temporadas y su aire romántico, inspirado en la ropa del siglo XIX, aporta un plus a cualquier estilismo.

Este tipo de mangas, que pueden ser cortas o largas, adoptan diversos nombres según la forma, que depende del lugar y distribución de los frunces: balón, jamón, globo, farol… pero todas coinciden en que son mangas con mucho volumen.

Las vas a ver en blusas, en tops y en vestidos y su gran éxito radica en dos virtudes: que consiguen hacer interesante cualquier prenda, por sosa y aburrida que sea, y que potencian la silueta femenina afinando ópticamente la cintura.

Para que sienten bien es importante elegir el modelo más adecuado a tu silueta, evitando poner el acento en la parte de tu figura que no necesita más volumen y optando por las que ayuden a equilibrarla, y evitar combinarlas con otras tendencias muy llamativas para que solo ellas sean el centro de atención.

El combo de María Fernández Rubíes está formado por una blusa de estampado Liberty y unos shorts vaqueros. Este conjunto resta candidez a la blusa, suma romanticismo al pantalón y añade un toque vintage con unos zapatos de tacón cuadrado.

Andrea Sañes apuesta por un estilismo fresco y muy de tendencia, combinando una blusa blanca con unas bermudas vaqueras y zuecos. Una de las lecciones que hay que aprender de su look es que las mangas abullonadas estilizan más el cuello y el escote si te recoges el pelo.

La falda lápiz y los pantalones pitillo son algunos de los mejores compañeros de los tops y camisas de mangas con volumen, pero no hay que descartar los de corte amplio. En este caso lo ideal es apostar por un cropped top o por patrones ceñidos al cuerpo para equilibrar la silueta. Si en lugar de recogerte el pelo apuestas por un buen escote como el de Alexandra Pereira, también ayudas a estilizar tu figura.

Ángela Rozas ha elegido un look monocromático compuesto por un pantalón de talle alto y un top minúsculo de mangas cortas con muchísimo volumen. El conjunto tiene todos los ingredientes para que las mangas sean las auténticas protagonistas del estilismo y, además, el detalle que ayuda a poner el acento en la cintura.

El nido de abeja es un tejido perfecto para combinar con este tipo de mangas. Lo ideal es usar este bordado elástico que se ciñe al cuerpo con un modelo de mangas a todo volumen que acapare todo el protagonismo. Si optas por un patrón de hombros descubiertos como el de Patricia Sañes, no será necesario que te recojas la melena.

Este patrón de mangas encaja a la perfección con vestidos de estilo romántico, pero hay que saber encontrar un punto intermedio para no caer en el exceso de candidez. La fórmula consiste en saber jugar con los contrastes entre los tejidos y los patrones y la apuesta de Belén Hostalet con escote de vértigo en la espalda es un ejemplo perfecto de cómo conseguir este equilibrio.

El look campesina es una de las tendencias más recurrentes de esta temporada y una opción perfecta para lucir mangas abullonadas. Silvia García Bartabac hace una clara apuesta por un estilismo campestre con vestido largo de manga farol, zuecos de piel y una bandana como tocado. Es un estilo muy apetecible, pero hay que tener cuidado de no abusar de ciertos códigos si quieres huir del disfraz.

Los vestidos mini son otros de los grandes aliados de este tipo de mangas. El recurso fácil, y a estas alturas un poco pasado, es combinarlas con un vestido ceñido al cuerpo por eso la opción de un vestido con volumen de mangas abullonadas es mucho más arriesgada, pero también más interesante.