Si vas a preparar una noche especial con tu pareja debes cuidar cada detalle, desde el ambiente o la cena hasta tus prendas íntimas, porque elegir una lencería que te hagan sentir especial es un recurso perfecto para ir preparando tu ánimo y predisponer las cosas para que todo salga bien.
Algunos tejidos como la seda o el encaje están especialmente pensados para estas ocasiones y tienen por si mismos cierto poder de seducción, sin importar el tipo de sujetador, braga o tanga que lleves puesto. Lo mismo sucede con ciertos colores como el negro o los tonos más oscuros de verde, azul y burdeos, así como con algunas prendas como los corpiños o los ligueros, que no son para llevar a diario, pero que en días especiales ayudan a levantar el ánimo.
Las opciones son muchas y no necesariamente todas tan sensuales, hay prendas íntimas muy sugerentes para todos los estilos de mujer, de las más tímidas a las más atrevidas, de las que buscan impactar a la primera a las que prefieren tomarse las cosas con calma y esta selección te puede ayudar a elegir esas con las que más cómoda te sientas y que mejor te identifiquen.
Un sujetador especial: bustier y bralette
Una de esas prendas sensualísimas con la que además puedes realzar tu figura es un bustier, una prenda a medio camino entre un sujetador y un corsé. Se diferencia del primero en su banda de sujeción llega a cubrir las costillas y del segundo en que no alcanza la cintura ni modifica la silueta.
Si la prenda no va armada, no tiene como función realzar el pecho y no es más que un sujetador con una tira ancha, se le conoce como bralette, que puede ser tan sexy como un bustier, especialmente cuando se eligen colores como el negro o el azul marino y tejidos como el satén o el encaje.
Apuesta por la seda bajo tu ropa
Las prendas más sensuales no siempre son las más descaradas, son aquellas que hacen sentir sexy a cada persona. Una opción perfecta para una noche especial es llevar bajo tu ropa de calle una combinación de seda y encaje que es uno de los mejores trucos lenceros para que la ropa siente como un guante, pues evita la electricidad estática y que las prendas se te peguen al cuerpo. Para entender el poder sensual de una combinación es imprescindible inspirarse en la película ‘Nueve semanas y media’, que te atrevas o no con el famoso baile de Kim Basinger es cosa tuya, pero el estilismo ya lo llevas puesto.
El liguero no defrauda
Un liguero es una prenda íntima que va sujeta a la cintura y de la que parten unos tirantes, dos en el delantero y dos en la espalda, que sirven para sujetar las medias. Aunque cayó en desuso desde la aparición de las medias panty, sigue siendo la representación de la lencería sensual por excelencia. A pesar de que hoy se busca que las prendas interiores sean fundamentalmente cómodas, no hay que desestimar el poder estético de los ligueros si lo que necesitas es un golpe de efecto para una noche diferente.
Elige una sola pieza: el body
Cuando hablamos de los bodies no nos referimos a esas prendas de algodón que se usan a modo de camiseta para salir a la calle, nos referimos a esas prendas interiores de una sola pieza elaboradas a base de encaje, seda y transparencias, que ayudan a que la ropa siente como un guante porque evitan que se pegue a la piel y señale lo que no tiene que señalar. Algunos están elaborados específicamente para sujetar aquí y levantar allá, de manera que moldean el cuerpo y estilizan la figura.
La picardía del babydoll
Un babydoll es una prenda para dormir muy corta, holgada y especialmente sexy pues generalmente se confecciona en tejidos brillantes como seda y satén, o transparentes como el encaje y la gasa Se trata de una prenda que deja las piernas totalmente descubiertas y casi siempre también las bragas, que suelen formar parte del conjunto. Los patrones suelen llevar lazos, encajes y cintas que confieren a la prenda un aspecto aniñado, de ahí el nombre con el que se conoce a esta prenda.