Su capacidad de influencia puede que supere a la de cualquier influencer. Sin tener un perfil de Instagram. Sin haber hablado jamás en público. Sin necesidad de aturullarnos con stories. Siguiendo la estela de su padre, Marta Ortega siempre ha rechazado conceder cualquier tipo de entrevista. La fuerza de Inditex, grupo textil fundado por Amancio Ortega hace ya más de 45 años, ha sido suficiente para tener la visibilidad mediática que necesitan para publicitar su marca. Sin embargo, "el arma secreta de Zara", como la define The Wall Street Journal Magazine, decidió hacer una excepción y romper con el misterio en el suplemento del Wall Street Journal, del que fue portada.

Sin un papel definido dentro del grupo, por entonces Marta Ortega nos contó qué hay de ella en esos diseños que han democratizado la moda a través de firmas 'low cost' como Massimo Dutti, Pull & Bear, Bershka, Oysho, Uterqüe, Lefties y Stradivarius. Y sí, también Zara. Supervisar el diseño, el merchandising o la imagen de la firma eran algunas de las funciones que ejerce a diario.

Ahora, tras un anuncio institucional, las cosas cambian, y a partir de abril de 2022 ocupará el cargo de presidenta de Inditex tras la desvinculación de Pablo Isla, último en ocupar este cargo, con el grupo. Pero vayamos atrás: ¿qué pensaba del emporio hace meses, cuando aún se desconocía este paso decisivo en su carrera?

Cada mañana, después de llevar a su hijo Amancio al cole, la Ortega más popular del clan se reunía con Miguel Díaz, su CFO, y con otros altos cargos para evaluar el estado del gigante gallego. También visitaba semanalmente alguna de las más de 10.000 tiendas con las que cuentan por todo el mundo.

Volvía a su oficina, donde compartía espacio de trabajo con sus compañeros (una vieja costumbre de su padre, que recorría los pasillos de Arteijo, La Coruña, para compartir tiempo con sus empleados). Y al terminar el día regresaba a su dúplex, donde les esperaban su marido Roberto Torretta, encargado de las comunicaciones online de Inditex, junto a su hijo mayor y la pequeña Matilda, a la que dio a luz en marzo de 2020.

Escrito mayoritariamente en estilo indirecto, en este reportaje que era fruto de una extensa entrevista con Marta Ortega y que fue realizado por la periodista Elisa Lipsky-Karasz, pudimos conocer la postura de la empresaria de 37 años con respecto a la fama. A pesar de que cualquiera la identificaría al escuchar su nombre (y sobre todo su apellido), ella "se siente en paz" en este sentido "porque puede pasear por las calles de forma tranquila.

En 2011, cuando Amancio Ortega decidió echarse a un lado para legar el cargo más alto de la empresa a Pablo Isla, ya se habló de Marta como la gran heredera de Inditex. Y aquí es donde dio el gran titular de la entrevista (y la pista definitiva sobre lo que acaba de pasar): "Nunca sabes tu futuro y estoy abierta a él. Pero, para ser honesta, me gustaría permanecer cercana al producto. Creo que es lo que mi padre siempre hizo. Siempre estaré donde más me necesite la compañía".

Por lo que añade en el reportaje, esto parece complicado. Aunque se habla de ella como "la voz subterránea" de Zara, todo lo que vaya más allá de las prendas, del contenido, le está de más. "Por supuesto que somos una gran compañía, pero siento que no es tan grande, no sé nada sobre las grandes cifras. Ni siquiera queremos hablar de ellas. En nuestro día a día no es algo que nos preocupe", ha comentado.

En su primera entrevista, Marta Ortega tampoco podía rehuir de las polémicas. Hablamos de las acusaciones de plagio que siempre han rodeado a los diseños de Inditex por eso de llevar las tendencias de la pasarela (y las firmas de alta costura) al pueblo. "Intentamos buscar la mejor de las calidades y el mejor de los diseños. Respetamos el trabajo de la gente (...) Creo que tenemos nuestra propia identidad. Llevamos mucho tiempo desarrollando nuevos productos desde cero", ha reivindicado.