Las chanclas y sandalias con calcetines es una de esas tendencias que nos han hecho mirar para otro lado durante mucho tiempo. Pero lo cierto es que ahí sigue, y las expertas en moda nos demuestran cada día que se trata de una combinación que no debemos pasar por alto.
Katie Holmes consiguió revolucionar las redes paseando por las calles de N.Y. el pasado mes de febrero con unas sandalias de JW Anderson y unos calcetines rosas. Si ella se atrevía, no podíamos ignorarlo por más tiempo. Las influencers nórdicas hacía mucho que nos habías mostrado también con qué estilazo combinan las sandalias con calcetines cuando bajan las temperaturas. Pero cuando llegaba el verano, la idea de que esa mezcla era más de guiris que de insiders seguía instalada en nuestra cabeza.
Ahora, en cambio, caemos rendidas ante la forma de llevarlas de Blanca Miró, Gala González o Leandra Medine. Pero no son las únicas, e Instagram nos deja buena muestra de ello.
En la Antigua Roma los soldados ya calzaban sus sandalias con calcetines para protegerse de las inclemencias del tiempo y evitar las rozaduras en los pies. Pero fue en el siglo XIX cuando los viajeros europeos comenzaron a utilizar sandalias con calcetines para recorrer otros países. Aunque resultaba chocante a nivel estético, sobre todo en algunas culturas como la nuestra, no dejaron de llevarlas y, al menos en este caso, la insistencia acabó por convertirse en tendencia.
Hace años veíamos looks atrevidos en los que sandalias de fino tacón se combinaban con calcetines delicados y femeninos, con volantes, rejilla o transparencias. Ahora la tendencia comfy ha dado un giro de 180º a la forma en la que se llevan las sandalias con calcetines. Los modelos de sandalia son planos, cómodos y todoterreno. Los calcetines básicos, confortables y en tonos generalmente neutros, aunque también vemos algunos con finas rayas de colores que nos encantan.
Los motivos para mezclar sandalias y calcetines son varios, y siempre juegan a nuestro favor. Por un lado no es necesario que renunciemos a este tipo de calzado cuando llega el invierno. Pero también podemos llevarlas así, con calcetines, cuando las temperaturas no son lo suficientemente altas, aunque estemos en verano. O sencillamente porque nos apetece sumarnos a esta tendencia que cada vez tiene más seguidoras.
Ya hemos dicho que la tendencia es clara, modelos cómodos y planos, ya sea con plataforma. velcro o hebillas XXL. Si intentamos descubrir cuáles son las que más se llevan, la conclusión es evidente, y es esta:
El modelo Arizona de Birkenstock, un clásico de las “ugly sandals” que se ha convertido en una de las sandalias más buscadas en los últimos años, son sin duda las preferidas para llevar con calcetines. Influencers y celebs han caído rendidas ante ellas y las muestran orgullosas en redes.
Las Teva son otra marca de sandalias que triunfa desde hace años y que se posicionan como la gran alternativa a las legendarias Birkenstock. Además de las más básicas en colores lisos, los modelos que mezclan todo tipo de colores cautivan a las insiders, las lleven con o sin calcetines.
Las sandalias cangrejerasestán más de moda que nunca, y ese punto que tienen a medio camino entre un zapato y una sandalia ayuda a que queden tan bien con calcetines, como nos muestra Blanca Miró.
Las tradicionales abarcas combinadas con calcetines han sido todo un descubrimiento que tenemos que agradecerlo a Gala González y que no puede gustarnos más. De hecho, a las abarcas les ocurre algo parecido a las cangrejeras, y es que tiene ese toque de ser casi un zapato que invita a usar calcetines.
Y el último modelo que ha triunfado en redes tiene la pega de no ser apto para todos los bolsillos. Las “ugly sandals” de Chanel, que cierran con velcro, han arrasado en Instagram y una de las formas más cool de llevarlas es con calcetines.