Según Versace, cuando una mujer cambia su imagen demasiado de una temporada a otra, es porque se ha convertido en una víctima de la moda y si una mujer es capaz de cambiar su estilo de los pies a la cabeza, esa es Mary Kate Olsen. Si un día fue casi gótica, porque lo marcaba la tendencia, de pronto pasó a ser hippy-chic, porque la moda decía había que serlo. Hace pocos meses la vimos con un perfecto estilo ‘lady like’, nada que ver con sus otros ‘looks’ pero es lo que se lleva y ella ha dejado claro que se entrega a las tendencias.

Hace un año, en Coachella, los shorts de Alessandra Ambrosio se abrochaban bajo la cadera, eran incómodos para agacharse pero a ella, sin asomo de michelines, le sentaban como un guante. Hace unos días la pillamos con unos cuyo talle llega hasta el ombligo, que le hacen las piernas aún más largas y que, como no podía ser de otra manera, están de absoluta tendencia.

Cada temporada nos regala un estampado estrella, esto para la cantante Gwen Stefani no es ningún secreto porque ha ido componiendo un armario a base de cuadros escoceses, lunares y, esta primavera, rayas verticales, que no es capaz de superar ni el catálogo más completo de Zara.

No sólo se pone de moda un modelo de pantalón vaquero, también la manera de llevarlo, si hace poco lo normal era ver pantalones acampanados arrastrando por el suelo, este año los pitillos remangados son lo más. Jessica Alba ha tomado nota y harta de tanto bajo roto, se ha apuntado a la moda de doblar el pantalón por encima del tobillo.

Los complementos de la temporada se suelen ver desde lejos, si el pasado verano las playas se llenaron de gorros estilo ‘cow-boy’, lo más para este año son las gorritas ‘navy’. Paula Echevarría ya se ha apuntado a la tendencia e igual que el año pasado se dejó ver con el sombrero de moda, esta temporada también.

En cuanto a los bolsos, dejarse llevar por la moda es, casi siempre, cuestión de tamaño. Si lo más hace un año eran los bolsos tamaño XL (terribles para la espalda), este año lo más es menos pues se llevan los bolsos pequeños. Miranda Kerr, obediente, se apuntó a los grandes y ahora hace lo mismo con un bolsito que además es de color flúor, la moda vamos.

Unas buenas gafas de sol son un gran aliado para el verano, pero en esto también hay tendencias muy marcadas. Si hace un año las gafas degradé con forma de mariposa diseñadas por Tom Ford eran lo más, Giovanna Battaglia las llevaba; si este año las de espejo de Spektre han arrasado en todas partes, ella también las usa.

Que levante la mano quien no tenga una camiseta en el armario que ya no usa, se quedan antiguas por sus estampados, sus colores y, como no, por sus mensajes. El verano pasado todo eran camisetas largas llenas de consignas, como la de Miley Cyrus. Este año, con frases o sin ellas, lo importante es que no lleguen al ombligo, como la roja de Miley Cyrus que anuncia a voces su vídeo 'Channing All Over Your Tatum'.

Para lucir escote no puedes tener remilgos, Paz Vega lo sabe y si tiene que enseñar canalillo, porque se lleva hacerlo, ella lo hace. Pero si la moda cambia y hay que descubrir la espalda, lo que toca este año, no hay quien la gane en centímetros descubiertos. Ella sabe lo importante que es una foto y regala su mejor pose en cada ocasión.

También el pelo se deja llevar por las modas y algunas famosas sucumben al cambio de ‘look’ con un paso por la peluquería. Elsa Pataky ha pasado por las mechas californianas, el flequillo (postizo) y este año se ha atrevido con un radical corte de pelo. Tres cambios de estilo que hacen de ella tres mujeres diferentes.