{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
Los trikinis de mujer están de moda. Pensábamos que habían desaparecido de las últimas tendencias y, aunque seguían saliendo verano tras verano a escena, quedarían relegados a un segundo plano en nuestro armario de verano. Pero no podíamos estar más equivocadas.
Si desde hace unas temporadas ha sido el bañador el que ha desbancado al bikini para hacerse el traje de baño más repetido a pie de playa o piscina, este año, este tiene que dejar paso a su hermano el trikini, que se proclama como la opción para zambullirse y tomar el sol por excelencia. Pero no en esa clásica forma cut out que unía la parte de arriba y abajo en el medio, dejando los lados y la espalda al aire. Ahora, los trikinis de mujer llegan pisando fuerte en todas sus versiones: de flores, a todo color, de rayas, trikinis brasileños, asimétricos, con las aberturas en todas partes en las que se nos ocurran… En definitiva, ahora es el bikini el que queda a un lado cediendo su puesto en el cajón de la ropa de baño. ¿Preparada para un verano de trikinis y bañadores?
Las flores son el estampado de los trajes de baño por excelencia, especialmente en su versión más tropical. Y es que pocos estampados hay más veraniegos o más propios de trikinis y bañadores que las flores, que aportan una nota de color a nuestro moreno. Una prueba de ello es este trikini estampado de Vince Camuto disponible en Zalando y rebajado a 47,97 euros.
Otro de los estampados del verano, aunque no para de repetirse cada temporada estival, son las rayas. Estas cubren también los trikinis, especialmente en su versión marinera, como este de Oysho (35,99 euros), convirtiéndolos en el mejor traje de baño de nuestro armario para ir a la playa.
Al igual que ocurre con los bikinis, los trikinis de mujer también pueden dividirse en parte de arriba y parte de abajo, respondiendo ambas a distintos estilos. Uno de ellos, en el caso de la braguita es el trikini brasileño. Se trata de uno de los trikinis más atrevidos y arriesgados, pero que más potencian estratégicamente las curvas de nuestra anatomía. Eso sí, hay que tener cuidado con este tipo de trikinis ya que, al ser más pronunciados, no sientan bien a todos los tipos de cuerpos. Un ejemplo es este de Shein (11 euros), decorado con cintas estratégicamente, para disimular ciertas partes.
En este mismo sentido, están también los trikinis de estilo vintage, como esos bikinis que desde hace varias temporadas se han puesto de moda. Estos crean el mismo efecto que aquellos bikinis y también estilizan la figura afinando la cadera y haciendo las piernas visualmente más largas, como este de estilo bohemio de Etam (45 euros). Estos suelen ser discretos aunque para crear el efecto del bikini, la abertura, en lugar de a los lados es en el centro para marcar más la separación y el largo de la braguita.
Los trikinis y bañadores han tomado una nota de elegancia y distinción, como si de un top se tratase. Tanto es así que incluso adaptan a ellos mismos los escotes de prendas de vestir, que llevaríamos a una gala o a una cita más especial. Incluso crean escotes cruzados o llevan cinturón. ¿El resultado? Trajes de baño de lo más elevados, como este de Women’s Secret, rebajado a 31,99 euros.
De un estilo mucho más parecido al de un bañador y, por tanto, mucho más discreto. Este tipo de trikinis sobre todo sienta bien a aquellas siluetas con poco pecho, ya que se potencia pero sin resultar excesivo. Además, su patrón da un toque de delicadeza que sienta genial a cualquiera que lo lleva. En el caso de este de Oysho (29,99 euros), al además incluir pocas aberturas, se potencia también la cintura pero de forma más discreta adaptándose a todos los gustos y estilos.
Como hemos visto, cada vez más los trikinis se acercan a la idea que tenemos de bañador, arriesgando poco con aberturas muy discretas. Pero para las que amen la esencia original del trikini, estos todavía, aunque se verán menos, estarán al pie del cañón con diseños que marquen la cintura y cadera pero que estilicen los laterales del cuerpo, cubriéndose solo el centro, por donde se unen ambas partes de la pieza. Por ejemplo, este de La Redoute, rebajado a 19,99 euros. Este tipo de trikinis sienta bien, especialmente, a los cuerpos que tienen poco marcada la cintura o con poca cadera, ya que las hace resaltar y crea el efecto de que se vean más pronunciadas.
Otra opción para las más discretas son los trikinis cruzados. Aunque estos cuentan también con numerosas aberturas, no son demasiado pronunciadas y no dejan a la luz aquello que no se quiera ver, sino que lo hacen de forma discreta. Una de esas opciones es este con tono deportivo, de H&M (29,99 euros).