Violeta Mangriñán y Fabio Colloricchio están en una nube desde que dieron la bienvenida a su primera hija. Gala lleva poco más de una semana en el mundo, sin embargo, ya se ha convertido en el tesoro más preciado de la pareja. La exconcursante de ‘Supervivientes’, que no ha dudado en hacer un seguimiento de todo su embarazo, sigue compartiendo en sus redes sociales cómo están siendo sus primeros días como mamá, sus sensaciones y su realidad posparto.

Así, tras la pregunta de un seguidor, la influencer se ha sincerado como nunca y ha explicado cómo ha cambiado su relación con el argentino tras la llegada del bebé. “Por el momento,  en mi caso cambia a mejor. Fab y yo siempre que nos pasan cosas importantes ya sean malas o buenas somos una piña. Y ahora siento que estamos más unidos que nunca”, está convencida de que el nacimiento de la niña ha fortalecido aún más su relación, aunque es consciente de que “es pronto para responder esto”.

Aunque, como cualquier hijo de vecino, también han habido momentos de tensión en la convivencia por los cuidados de la pequeña. En el caso de Violeta y Fabio, eso sí, ha sido un desencuentro breve y pasajero. "Los primeros dos días de Gala en casa, discutimos un poco porque él se dormía en su turno de biberón. Después de la bronca, no ha vuelto a pasar, todo hay que decirlo", hablaba con la misma naturalidad de sus desencuentros.

En esta ronda de ‘preguntas y respuestas’, Violeta también ha explicado si su vida sexual con Fabio se ha visto alterada por Gala. Durante el embarazo, “se mantuvo muy activa desde el principio hasta el final”, según la que fuera tronista de ‘Mujers y Hombres y Viceversa’, en cambio, tras dar a luz sí que se han visto obligados a frenar su ritmo “mínimo 40 días por precaución, porque después de un parto vaginal la zona está muy sensible y sangrando 24/7”.

Mantener relaciones sexuales durante la gestación puede llegar a ser muy beneficioso, según informan desde la página web especializada, 'Bebés y más': "Tener sexo durante el embarazo activa receptores en el cerebro que ayudan a calmar los dolores de las contracciones". Una vida sexual activa durante este periodo favorece el sueño, mejora el estado de ánimo, fortalece la unión afectiva con la pareja e, incluso, puede mejorar la recuperación postparto.