Está a punto de cumplirse medio año desde que Alice Campello vivió uno de los momentos más duros de su vida. La italiana estuvo a punto de perder la vida tras el nacimiento de Bella, su cuarta hija con Álvaro Morata. Tal y como contó ella misma tiempo después, una vez nació su hija empezó a sangrar "muchísimo" y dejó de recordar.

La modelo estuvo ingresada en la UCI, dormida, desde las 9 y media de la mañana hasta las 9 y media de la noche. "No había dejado de sangrar en ningún momento, tuvieron que hacerme muchas transfusiones y, al final, me pusieron un globo dentro del útero, que no se había contraído y me produjo esa hemorragia tan grande", contó ella misma unos meses después de lo ocurrido.

Álvaro Morata también aseguró en aquel momento que vivió "muchísimas horas pasándolo fatal" en las que se dio cuenta de que su vida "no tendría ningún sentido" si le pasaba algo más grave a su mujer. Ahora, cuando están a punto de cumplirse seis meses de aquel susto, la modelo ha acudido a un evento y ha explicado cómo se encuentra y la durísima conversación que tuvo con su marido justo después de salir de la UCI.

La modelo, en su última aparición pública, ha contado que el postparto ha sido "bastante difícil" y cree que ese ha sido el motivo de haber adelgazado más rapido de lo normal. "Realmente estoy bien, ya llevo uno o dos meses que por fin estoy bien, a nivel mental también. Al final todo el mundo me decía que estaba genial, pero por dentro no era así. Con todos, también con los mellizos, tuve un postparto muy complicado. El primero fue pasar de estar en pareja a tener dos niños, me cambió la vida literal. A nivel mental es complicado", ha contado Alice.

Campello ha recordado ante los compañeros de Europa Press cómo vivió su marido aquel duro momento. La italia ha contado que realmente lo pasó peor que ella porque él estaba viviendo todo, despierto, sin saber lo que le iba a pasar. "Cuando volvimos a casa yo me despertaba y él estaba toda la noche despierto para controlar que estuviese bien", dice de sus primeros días en casa tras el susto.

Una vez salió de la UCI, Álvaro y Alice se abrazaron, lloraron mucho y el deportiste le dijo que, si le hubiese pasado algo, "su vida no tendría ningún sentido. "Me dijo que hubiese preferido que le pasara a él que a mí y que si hubiese tenido que darme su corazón me lo habría dado. Yo ya lo sabía, me lo demuestra todos los días tanto. No ha sido una prueba más", ha contado la modelo.