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Parejas

César Alierta e Isabel Sartorius tuvieron una relación de tres años: así fue el romance que terminó en amistad

César Alierta, el que fue presidente de Telefónica durante casi 16 años -entre 2000 y 2016-, no ha sido conocido solo por sus logros profesionales. Aunque siempre ha intentado llevar su vida privada en la más estricta intimidad, sus relaciones han terminado siendo públicas. El empresario estuvo casado con Ana Cristina Placer, pero nunca tuvieron hijos. Ella falleció en el año 2015 y, dos años después de su pérdida, César Alierta comenzó una relación con Isabel Sartorius, la que fue novia del rey Felipe VI en su juventud.

Su relación comenzó en el año 2017 tras unos meses de amistad. Los protagonistas siempre quisieron mantener su relación alejada del revuelo mediático, por eso fueron pocas las imágenes que trascendieron de su romance. Unos meses más tarde, la propia Isabel Sartorius confirmó a la revista ¡HOLA! que César era un hombre "extraordinario" y que sí era verdad que se estaban "conociendo".

Cuando comenzaron su relación, el empresario estaba recuperándose entonces de un infarto que acababa de sufrir y que le obligó a pasar un tiempo ingresado en el hospital en coma inducido. En noviembre de ese mismo año, el empresario y su nueva pareja hicieron su primera aparición pública con motivo del concierto homenaje a la cantante Cecilia, que se celebró en el Palacio Municipal de Congresos de Madrid. La revista Lecturas publicó entonces las primeras fotos de la pareja y, a partir de ese momento, sus encuentros públicos fueron más frecuentes.

Isabel Sartorius y César Alierta rompieron en 2021 tras tres años juntos

Aunque siempre fueron muy discretos con su vida privada, en febrero de 2021 se hacía pública la noticia de su separación. Según publicaba entonces el portal 'Informalia', el confinamiento supuso un antes y un después. La pareja pasó este periodo separada y eso hizo mella en su historia de amor. Pasada la cuarentena y aunque ambos se esforzaron por recomponer su relación, ya no había marcha atrás. El distanciamiento durante esos meses se había convertido en un obstáculo insalvable para ambos, ninguno de los dos concebía un futuro juntos y el fin de la relación era un hecho.

No obstante, a pesar de esa ruptura, la pareja terminó en buenos términos. Ambos mantuvieron el contacto tras su separación y fueron capaces de transformar su amor en una bonita amistad, por lo que se les pudo ver seguir haciendo planes juntos en los meses posteriores a la separación.