Marta Peñate se ha sentado en el plató de '¡De Viernes!' tras su vuelta de Honduras para hablar de su paso por 'Supervivientes' y de su lucha por ser madre junto a Tony Spina. Horas antes de acudir al programa, la ganadora utilizaba sus redes sociales para explicar que llevaba dos años haciendo público el tema del embarazo "por dar visibilidad a este tema, sin ánimo de lucro" y para recibir ayuda y poder ayudar a otras personas que están en su misma situación. "Empecé metiéndome en fotos buscando información sobre FIV porque estaba perdida, y por eso mismo decidí hacerlo público: por ayudar y que me ayuden. Sin victimizarse, hablaré orgullosa de este proceso que me ha tocado vivir y no es fácil", adelantaba antes de sentarse en el plató.
De la mano de Tony Spina, Marta Peñate contaba de cómo ha afectado a su relación esta lucha por ser padres. La concursante de 'Supervivientes' explicaba que cuando llegó a Honduras se sintió "culpable" porque, aunque estaban bien y siempre han estado bien, el tema del embarazo hizo que su pareja tuviera que aguantarle "mucha mierda y muchos cambios de humor". "Me decía que estaba obsesionada con el embarazo, y yo incluso le hablaba mal. Todo eso fue previo a ir a 'Supervivientes'. Pensé que esa obsesión me podía pasar factura en la relación", ha contado este viernes emocionada.
Por su parte, Tony Spina ha dicho públicamente que es consciente de que la que más sufre "es ella, que se ha tenido que operar y hormonar", pero que él, por su lado, lo único que puede hacer es apoyarla. "Esto es cosas de dos y la responsabilidad no es suya. Si viene genial, pero si no yo soy feliz contigo", le declaraba públicamente.
Marta ha explicado que de pequeña le quitaron un tumor en el riñón que los problemas nefrológicos están ligados a los problemas uterinos. Lo que ella no sabía y se enteró a los 32 años - cuando comenzaron la búsqueda del bebé - era que tiene dos úteros y dos cuello de útero. "Yo estaba muy perdida, me pasaba todo el día en internet buscando. Llegó un punto que lo quise contar para recibir la experiencia de la gente. Me tuvieron que quitar las trompas de falopio, y no sabes lo que para mí fue eso. Eso significó que no iba a ser madre nunca por mi propia cuenta. Salí de la cirugía llorando", ha contado emocionada.
Marta ha llegado a confesar que daría su cuenta bancaria y el dinero del concurso que acaba de ganar "por tener un hijo". "Tengo el sentimiento de madre y yo quiero ser madre. Que en un futuro no puedo serlo, obviamente intentaré ser la más feliz del mundo. Él no tiene ningún problema, él se hizo todas sus pruebas, y me siento culpable yo", ha confesado sobre el sentimiento de culpa que tiene hacia su pareja, que también ha querido siempre ser padre.
Sin embargo, Tony ha hacía una romántica confesión que provocaba las lágrimas de Marta: "Si yo no soy padre contigo, no quiero ser padre con nadie. El problema es de los dos".