Fueron durante años una de las parejas más conocidas de la crónica social patria. Eva González y Cayetano Rivera se conocieron en una fiesta en el verano de 2008 y, tras un flechazo, pronto comenzaron una relación sentimental que no trascendió hasta un año después, al salir a la luz por primera vez imágenes juntos. El papel cuché siguió con interés su vínculo, los pasos adelante como su boda en 2015 o el nacimiento de su hijo, el pequeño Cayetano, así como sus supuestas crisis. También su ruptura, que se dio por hecha en el otoño de 2022, aunque ellos no lo confirmarían hasta meses después. Ahora ha salido a la luz un acuerdo al que la expareja llegó tras divorciarse.

Cayetano ha centrado la atención mediática en los últimos días, desde que este pasado fin de semana decidiese anunciar públicamente su retirada de los ruedos tras dos décadas. Lo hacía compartiendo un emotivo vídeo en sus redes sociales, haciendo balance de sus años de trayectoria como torero, y refiriéndose a su "último baile": su adiós definitivo a las plazas de toros, que ya no pisará cuando comience 2025. Rivera aprovechaba, además, para agradecer el apoyo recibido en estos años. Pronto empezó a recibir mensajes de cariño, incluido el de su actual pareja, la portuguesa María Cerqueira.

Su decisión ha hecho que desde los medios de comunicación se haya puesto el foco de nuevo sobre la vida del mediano de los tres hijos de Carmina Ordóñez. En especial, sobre cómo será su posible realidad a raíz de su retirada, en qué empleará su tiempo o cuáles pueden seguir siendo sus fuentes de ingresos. En relación con esto, en estas últimas horas ha salido a la luz un detalle respecto de la situación inmobiliaria del diestro, que entronca con su matrimonio de varios años con la presentadora andaluza.

Eva y Cayetano, a diferencia de otras parejas famosas, nunca tuvieron negocios en común durante su casi década y media de relación sentimental. Pero sí compartían una propiedad inmobiliaria, sobre la que Vanitatis ha arrojado algunos datos recientemente. Se trata de una finca que la modelo y el diestro decidieron comprar en mayo de 2022, apenas unos meses antes de que se empezase a hablar de su crisis y posterior ruptura en los medios de comunicación. En palabras del citado medio, se trataba de un terreno de mil metros cuadrados situado en una zona nueva del municipio sevillano de Mairena del Alcor, el pueblo natal de González, y en el que la pareja se acabaría casando en 2015.

La compra de la parcela, que tenía uso residencial, se hizo al 50% entre ellos, con el fin de construir allí una vivienda. Pero la ruptura del matrimonio acabaría por frustrar estos planes, quedando este detalle por resolver cuando se supo de su separación (la custodia del pequeño Cayetano, de seis años, se dividió entre ambos progenitores). Como explica Vanitatis, también esto se ha resuelto: Eva decidió comprarle a su exmarido su parte, por lo que actualmente es dueña del 100% del terreno.

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