El pasado domingo, 8 de diciembre, Lola Lolita e Isaac Belk anunciaban su ruptura tras tres años de relación y después de algunos rumores que apuntaban a su separación desde hacía unas semanas. En el vídeo que la propia pareja hacía público a través de sus redes sociales, ambos confirmaban que había sido una decisión de mutuo acuerdo para “mejorar por separado” después de algunas diferencias sobre las que no quisieron ofrecer más detalles.

Solo unas horas después de sincerarse sobre el punto y final de su historia de amor, de la cual han sido partícipes los millones de seguidores que acumulan y a los que optaron por dar una explicación de lo ocurrido, los influencers se han reunido tal y como han mostrado de nuevo.

Este martes, Lola e Isaac han vuelto a verse las caras después de anunciar su ruptura. El encuentro ha tenido lugar con motivo de la cena de Navidad de ‘Lolita Manager’, la agencia de creadores de contenido que fundó hace dos años Lola, la madre de la de Elche, y a la que pertenecen tanto ella como su exnovio. Del mismo modo, la hermana de Lolita, Sofía Surferss, y el que fuera pareja de esta, Álvaro Suárez, forman parte de la misma compañía, razón por la que también se reencontraron allí.

Ha sido desde el restaurante Borual Torcato, la nueva propuesta gastronómica ubicada en la calle Serrano de Madrid, donde las hermanas han compartido un TikTok en el que no han dudado en lanzar un guiño directo a los que forman parte de su currículum amoroso, quienes permanecían sentados frente a ellas: “Podríamos haber sido un dos pa dos perfecto pero le tuvieron miedo al éxito”, han escrito en las imágenes que comienzan protagonizando ambas y que posteriormente pasan a enfocar a los influencers mientras miran a la cámara.

No se trata de la primera referencia que la de once millones de seguidores hace a su ya antigua relación, la cual le llevaba a subir también durante el día de ayer un selfie en el que aseguraba que “quieren que supere el tema pero me mandan stickers del tema”, añadiendo una captura de pantalla de una conversación con una persona cercana que, a modo de respuesta, le mandaba un sticker capturado durante el vídeo en el que Lola y Belk confirmaban que habían puesto punto y final al romance que veían nacer hace tres años; mismas imágenes en las que, además, mostraba que conserva en su fondo de pantalla una fotografía de ambos.

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