El pasado mes de agosto, Álvaro Morata y Alice Campello anunciaron su separación tras ocho años juntos y cuatro hijos en común. Para evitar especulaciones sobre el motivo de su decisión, el futbolista emitió un comunicado en sus redes sociales en el que aclaraba que no hubo faltas de respeto, solo "muchas incomprensiones continuas que, poco a poco, desgastan las cosas".

En estos meses los protagonistas han tenido una buena y cercana relación. Tanto es así que la modelo se mudó a Milán para que sus hijos pudieran estar cerca de su padre. A raíz de que pasaran las navidades juntos se rumoreo que podrían haberse dado una segunda oportunidad y este pasado lunes, 27 de enero, el periodista italiano Alessandro Rosica confirmaba la noticia.

Muchos periodistas españoles se pusieron en contacto con la pareja y ellos no dudaron en confirmar las palabras del italiano. Es más, unas horas más tarde utilizaron sus respectivas cuentas de Instagram para contarles a sus seguidores que habían retomado su historia de amor cinco meses después de dejarlo. En las últimas horas han sido muchos los que han reaccionado a esta reconciliación, incluida la madre de la modelo, que compartía un mensaje en sus redes sociales: "Se baila, se ríe, se llora, se lucha y se gana siempre juntos, los dos. Viva el amor".

Unos días después de que ellos mismos confirmasen su reconciliación, la periodista Silvia Taulés publica en Vanitatis que Alice y Álvaro emprendieron un negocio juntos antes de hacer oficial su segunda oportunidad. El pasado 14 de enero, el futbolista entraba en el cargo de representante en una empresa deportiva que fundó en 2017. Según aparece publicado en el Boletín Oficial del Registro Mercantil, Álvaro es ahora el representante de la sociedad Healthy and Sport Madrid, una empresa situada en Madrid.

Según apunta el medio citado, esta empresa se dedica a los servicios de podología y cuenta con un administrador único desde esa misma fecha: Tamora 2011, que es "el holding que ampara la mayor parte de los negocios de Morata". Desde 2023, está también administrada por su mujer, Alice Campello. Por tanto, Tamora 2011 es la sociedad que les mantiene unidos profesionalmente.

Hasta el año 2023, Álvaro Morata era el único administrador de la empresa y actuaba como apoderado su padre, Alfonso Morata. Sin embargo, en abril de ese mismo año cesó a su padre y pasó él a ser el administrador junto a su mujer. "En marzo de 2024 hubo una ampliación de capital de tres millones de euros y el resultado es que en la actualidad cuenta con un capital social de 5,7 millones de euros", explica el medio citado.

A pesar de esta separación pública que ha durado cinco meses, ambos siguen siendo los administradores y, a principios de enero, cuando aún era oficial su ruptura, ellos adquirían de manera conjunta una empresa de podología deportiva.

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