Ser 'celebrity' (o pareja de), punto de partida

"Cristiano es un ídolo de masas, todo lo que toca lo convierte en oro, los factores de crecimiento en sus redes sociales, principalmente en Instagram se deben a que además de ser una estrella del fútbol reconocidísima, es imagen de multitud de marcas que también se prestan a hacerle crecer en redes sociales", explica Ángela Villarejo, de la agencia Social Mood. A diferencia de los 'influencers' que empiezan, parte del trabajo ya está hecho. Empezando por las grandes marcas deportivas y siguiendo por su propia firma de ropa (y la de su hijo), CR7 lo explota.

Pero, si Georgina no era conocida, ¿cómo se explica su caso entonces? "Cuando alguien está con un 'celebrity', por defecto, lo empieza a ser. Las redes nos han proporcionado esa cercanía que no tenían ni tienen los medios de comunicación, de forma que ahora podemos saber en todo momento lo que está sucediendo en la vida de las personas a las que seguimos. En el caso de Georgina está claro, se ha convertido en un personaje interesante por toda la relación que ha tenido y la visibilidad que le está dando Cristiano Ronaldo". Sus Stories en casa o sus posados subidos de tono juntos tienen que ver. "Esto ha sido fundamental para su crecimiento exponencial en este tiempo".

Muchos seguidores, sí, ¿pero también influencia?

"El poder de influencia es mucho más que un número de seguidores", explica Villarejo. Conseguir conectar con los seguidores más allá de eso y generando impacto es el objetivo final. Pero, como señala la experta y a pesar de que las cuentas de Georgina y Cristiano no cuenten con un 'storytelling' (relato) muy desarrollado más allá del contar su propia vida en el caso de la primera y mezclar lo profesional y personal en el caso del portugués, de nuevo el interés que generan tiene que ver con su condición de famosos: "Un ejemplo claro es cuando Georgina sube una foto de una prenda de vestir que lleva y etiqueta a la marca. Estoy segura de que en poco tiempo se disparan las ventas. Eso es lo que marca la prescripción o el poder de influencia de un personaje tan conocido como ella", señala.

Asignaturas pendientes para hacerlo redondo

Es indiscutible que ambos, añadiendo a sus perfiles el relato de familia con sus fotos todos juntos con niño y bebés, haciendo con ello más pública que nunca la vida privada del deportista, las marcas quieren ser parte de esa intimidad.

Pero existe un error común que apunta Ángela Villarejo: "Al final creo que algo que se echa de menos a nivel usuario es que este tipo de personas conocidas un día patrocinan una marca, otro día otra, y así sucesivamente. Lo que hace que al final la credibilidad de las cosas que publiquen sea mucho más inferior. Para mejorar esto creo que es esencial mantener un poco 'fidelidad a determinadas marcas y no venderse a cualquier precio' -algo que Georgina acaba de empezar a hacer con una firma de ropa de yoga- porque al final el usuario no es tonto y se termina dando cuenta de cuándo una publicación es patrocinada".