Mientras todo un país se paralizaba por la pérdida de una mujer con la que aprendió gracias a sus libros, parte de los pensamientos de muchos estaban en su familia. Si ya era doloroso para sus lectores asimilar la muerte de Almudena Grandes, que fallecía este sábado a los 61 años a causa de un cáncer, no era difícil imaginar la sensación de vacío que su marcha habrá dejado en su marido, el poeta Luis García Montero, y sus tres hijos, Elisa, Marcelo e Irene.
De ahí que a lo largo de este fin de semana se viralicasen unas palabras que su viudo le dedicó hace ya unos cuantos años bajo un título que no necesitaba demasiada interpretación. ‘La ausencia es una forma de invierno’ era el texto que el que fue su marido desde 1994 escribió en su día a la autora.
En él, el que en estos momentos ostenta el cargo de director del Instituto Cervantes se manifestaba “como el cuerpo de un hombre derrotado en la nieve, con ese mismo invierno que hiela las canciones cuando la tarde cae en la radio de un coche” para expresar lo que “duele una noche con ese mismo invierno de cuando tú me faltas, con esa misma nieve que me ha dejado en blanco, pues todo se me olvida si tengo que aprender a recordarte”.
Ahora, tras un intenso domingo de recogimiento en el que familiares y amigos se reunieron en el madrileño tanatorio de La Paz para darle el último adiós a Almudena Grandes, su viudo Luis García Montero se ha pronunciado en Twitter para agradecer el aluvión de cariño que han recibido por parte de conocidos y anónimos y para contarnos con una rotunda frase el estado en el que se encuentra tras esta pérdida demasiado temprana.
“Gracias por todo el cariño en la muerte de Almudena. Supongo que estar hundido es un modo de seguir enamorado y de empezar una nueva vida con el amor de siempre”, ha escrito en su perfil personal en esta red social poco antes de que tenga lugar el entierro de la madre de Elisa, su hija pequeña.
Por suerte para los que admiraron y admiran la trayectoria de Grandes, aún existe una última obra escrita por ella que le 'salvó' durante los peores momentos del tratamiento oncológico y que no tendrá nada que ver con esa saga de 'Episodios de una guerra interminable' con la que trató de hacer un homenaje a su admirado Benito Pérez Galdós narrando a través de cinco libros (pronto serán seis) la guerra civil española y la posterior dictadura.