El pasado viernes, 7 de marzo, Jessica Bueno se sentaba en el plató de ‘¡De viernes!’ tras haber confirmado unos días antes, el 23 de febrero, su ruptura con Luitingo a través de un comunicado conjunto en sus redes sociales en el que aseguraban la inexistencia de terceras personas. A pesar de que con sus palabras ambos dejaban claro que había sido una decisión de mutuo acuerdo tras una bonita relación que había dejado evidencia de su amor, durante su intervención en el programa de Bea Archidona y Santi Acosta la modelo rompía a llorar tras escuchar unos audios del que fuera su pareja que habrían causado un “shock” en la anterior por su contenido.

Ahora, tras la polémica que ha azotado el vínculo entre los que vieron nacer su historia de amor durante su paso por ‘Gran Hermano’, ha sido la otra parte protagonista la que no ha dudado en pronunciarse al respecto tras la reacción de su exnovia.

Aunque el programa optó por no hacer públicos los audios de Luitingo y Jessica fue la única que puedo escucharlos, sí que recogió la reacción de la modelo: "Se supone que nos queríamos, estoy en shock. ¿Cómo ha podido hablar así de mí y de mis hijos? Una persona que te quiere no hace eso, yo jamás hablaré mal de él. Me duele porque sabe cómo lo he pasado, era mi mejor amigo, mi desahogo. Lo que más me duele es que hable así de mis hijos. Yo no le he dado motivos para que esté enfadado conmigo", sentenciaba.

Tras ello, según Marisa Martín Blázquez informó este sábado, en los mensajes el cantante aparecería manteniendo una conversación con alguien cercano a quien habría trasladado “cosas que se dicen cuando estás enfadado y que a lo mejor no piensas, más aún si la persona que tienes delante te azuza para que hables".

Después de lo ocurrido, era el programa ‘Fiesta’ el que conseguía contactar con Luitingo, que ha ofrecido sus primeras declaraciones sobre los hechos: "Ahora mismo estamos todos aquí en la casa reventados llorando y la verdad que súper mal. Estamos malamente, lógicamente”, ha comenzado explicando a Kiti Gordillo, haciendo referencia al duro momento que atraviesa tanto él como su familia.

A pesar de las informaciones que han visto la luz, el sevillano ha instado a “que digan lo que quieran” y le “hagan lo que quieran” sin ofrecer más detalles acerca de lo sucedido, y ha recalcado que por el momento pretende mantener su silencio: “Yo ni tengo ganas de hablar ni puedo hablar", ha sentenciado.

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