En 2006 Carmen Martínez- Bordiú pasaba por tercera vez por el altar para dar el “sí, quiero” a José Campos, un empresario cántabro. Fue el 18 de junio en la ciudad de Santander, en la que se armó un gran revuelo porque todos querían ver cómo la nieta de Franco se convertía en la mujer de su paisano. Desde la boda y durante siete años les vimos disfrutando juntos de su vida en común, aunque el divorcio llegó cuando, al parecer, se interpuso en la relación Luis Miguel Rodríguez, conocido como “el chatarrero”.

Para Carmen, Luis Miguel fue el amor de su vida y, aunque la relación terminó poco después, a día de hoy continúan teniendo una bonita amistad. Pero, ¿qué fue de José Campos? Mientras que estuvo casado con “la nietísima” era habitual verle junto a ella en la prensa del corazón. Aunque tras el divorcio, en 2013, se replanteó su vida y se alejó por completo del foco mediático. 

José Campos, que conquistó a todos con su eterna sonrisa y su carácter afable, no tardó en encontrar un nuevo amor tras separarse de Carmen Martínez-Bordiú. Mientras se tramitaba el divorcio, que no tuvo nada de amistoso, él se reencontraba con una antigua conocida de sus años de juventud. Se trataba de una profesora de los Salesianos, santanderina como él, llamada Marián Sousa.

Pronto se le vio mostrar su amor por la ciudad y Campos en aquel momento ya afirmaba no recordar quién era Carmen Martínez-Bordiú. La pareja pasó por el altar en 2014, cuando faltaban pocos meses para que naciera Martina, la hija que tienen en común y que está a punto de cumplir 11 años. La pareja sigue felizmente casada y es de todos sabido que Martina es la niña de sus ojos. 

En marzo de 2020 el mundo colapsaba a causa de la pandemia del coronavirus. Un momento muy delicado que José Campos tuvo que afrontar haciendo frente a un ictus del que tardó un año en recuperarse. Fueron meses complicados en los que tuvo que recuperar memoria y vocabulario, además de trabarse al hablar. Pero siempre se mostró optimista al no tener secuelas físicas y muy paciente con una recuperación que hizo de la mano de médicos y logopedas. Y, por supuesto, contando con el apoyo incondicional de su mujer y de su hija Martina. 

Antes de protagonizar portadas de la prensa rosa por ser el marido de Carmen Martínez-Bordiú, José Campos era conocido por su trayectoria como atleta, ya que con 22 años fue campeón del mundo de salto de longitud. Posteriormente se convirtió en empresario y fue directivo del Racing de Santander. Desde hace años se ha centrado en la hostelería y en su negocio de restauración, un restaurante llamado Galería Culturas.

Desde su apertura en 2015, Campos ha estado en primera línea para garantizar el buen hacer del local, que pronto se convirtió en centro de reunión de políticos y miembros del Racing de Santander. Posiblemente la etapa más dura del negocio fue en la que coincidieron las restricciones de la pandemia y el ictus que sufrió el empresario. Pero finalmente consiguió remontar en todos los sentidos y hacer de su local uno de los más concurridos de Santander. 

Sin duda José Campos vive feliz apartado del foco mediático y de la exposición pública que asumió durante los años de su matrimonio con Bordiú. Aunque posteriormente le tentaron para participar en diferentes programas y realities, no quiso formar parte de ellos. A día de hoy vive a las afueras de Santander con su mujer y su hija, disfrutando de su familia, de su negocio y, sobre todo, de la calma.

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