Santiago Cañizares y Mayte García nos sorprendían este miércoles con la noticia de su separación tras trece años de matrimonio. Antes de dar pie a especulaciones, la pareja lo anunciaba mediante un breve comunicado que colgaban a sus respectivos perfiles de Instagram, siguiendo la estela de otras parejas vips como Manuel Martos y Amelia Bono. “Queremos comunicaros que estamos pasando por un proceso de separación. Por el respeto, cariño y apoyo que nos habéis procesado sobre todo en los momentos duros, nos sentimos en la obligación de ser nosotros quien os lo transmitamos”, han señalado dirigiéndose a la prensa, que estuvo apoyándoles cuando en 2018 tuvieron que afrontar la muerte de su hijo Santi, que fallecía con tan solo cinco años a causa de un cáncer.

“Hemos intentado ser un ejemplo para nuestros hijos, familia y amigos”, reconocían. Y su propósito es seguir por esta senda. “Os pedimos máximo respeto, porque lo importante en estos casos es evitar el sufrimiento de los más pequeños”, han reclamado desde la serenidad, conscientes de que un divorcio como el suyo suele provocar una tormenta mediática que desean no afecte en lo más mínimo a sus tres hijas: Sofía, India y Martina.

Mayte, sin querer entrar en muchos más detalles, ha concedido sus primeras palabras a la revista ¡Hola! tras hacerse pública su separación. “Al final va a ser verdad que nada es para siempre, lo importante es la calidad, el cariño y el respeto que nos tenemos”, afirmaba que esta historia habría acabado en muy buenos términos. ”Nos seguimos queriendo mucho… pero cada vez vemos la vida de forma más diferente”, desvelaba el motivo principal que les había empujado a iniciar los trámites de su divorcio.

Santiago y Mayte formalizaron su relación en 2008, en un emotivo enlace civil celebrado en la paradisiaca isla de Ibiza. Fueron cuatro los niños que nacieron de este matrimonio: Sofía, India, Martina y Santi; que se unían a los tres que el exguardameta tenía de su primer matrimonio con Marina Conchello: Carlota, Lucas y Oliva. Fue concretamente con su único varón con el que vivieron el momento más complicado de sus vidas, después de que falleciera por una grave enfermedad.

El pasado mes de marzo se cumplieron tres años de su pérdida y sus padres compartieron en redes una conmovedora carta dirigida al pequeño: “Tres años sin ti, tres vidas desde entonces. Y las que nos quedan, muñequito hermoso de Dios. Quédate tranquilo, aquí todo en orden”, redactaba Cañizares, que se unía al homenaje de su hasta entonces mujer, que hacía saber a su hijo que había extraído grandes aprendizajes de su lucha: “Valorar lo que la vida nos presenta y con quien nos hace tropezar. Ayudar a quienes tienes, pero sobre todo aprender a cuidarlos. Y lo más importante VIVIR y conseguir lo que te propones, y nunca rendirse, NUNCA JAMÁS”.