Que su familia virtual está deseando una reconciliación con Ezequiel Garay es un hecho. Tres meses han pasado desde que oficializase su separación tras doce años de relación ininterrumpida con el padre de sus hijos. Y en este tiempo, el hecho de que la ahora expareja mantenga un vínculo de amistad es algo que sigue sorprendiendo a parte de su comunidad. Esa que, a raíz de unos stories compartidos por Tamara Gorro esta Semana Santa, ha colapsado su bandeja de mensajes privados preguntándole por cuál es su situación sentimental después de verles juntos disfrutando de unas vacaciones en familia.

Mirando a cámara, dirigiéndose “directamente” a sus fans, la influencer ha querido aclarar algunos puntos después de recibir tantísimos “Ay, Tama, habéis vuelto” a lo largo de este último fin de semana. “No hemos vuelto, no somos pareja, pero él tiene el mismo derecho que yo a estar con sus hijos unos días”, ha explicado.

Su intención, tal y como nos explicó en este vídeo, es que el “ambiente familiar” siga intacto y “que los niños vean a papá y a mamá llevándose bien, para qué privarles de eso”. Por desgracia, si algo nos ha demostrado el papel couché (y la vida real) es que tener una relación como la suya tras una ruptura suele ser la excepción, también en los casos vip.

“No estamos acostumbrados a esto porque otras parejas, por lo que sea, no tienen la suerte de poder estar juntos o llevarse bien. Estoy segura de que cualquier madre y cualquier padre desearía eso para sus hijos”, ha apuntado Tamara Gorro desde el camping en el que están desconectando junto a Shaila y Antonio, los dos niños que les unirán de por vida.

Este, el destino que han escogido para la primera Semana Santa en nueva normalidad, también ha sido objeto de debate entre su familia virtual. “Hoy he vuelto a veros. Me alegro de verte mejor. Me da mucha alegría verte entre toda la gente en el camping como si nada. Una más, eso me gusta, que sigáis disfrutando”, le escribía una usuaria hace unas horas. Una extrañeza que para Tamara Gorro, que siempre ha sido abanderada de la naturalidad, le sigue impactando.

Que le manifiesten con sorpresa frases como “te juntas con todo tipo de personas en el camping, como personas normales, fregáis, ponéis la lavadora en zona común, vais en chándal” es algo que, en palabras de la colaboradora de televisión, le “sorprende que sorprenda”.

Tamara, que cuenta con una situación económica holgada, es consciente que despertarse con los vecinos escuchando reggaeton “en un hotel de cinco estrellas no lo tienes”. Sin embargo, el ambiente que se respira, poder “conocer a un montón de gente”, hace que sus hijos “jueguen con toda clase de niños, sin marcar diferencia en nada”, lo que les permite adquirir “unos valores maravillosos” que no aprenderían en otro entorno. “Son felices, y yo también, porque puedo ir todo el día sin arreglar, sin maquillar y en chándal”, ha zanjado.