Los pigmentos responsables del bronceado se llaman melanocitos. Con la vuelta a la rutina, es necesario darles un empujón a través de la ingesta de betacarotenos. Para ello, los zumos son la clave.
La receta
"Licúa una zanahoria, añade el zumo de una naranja y de medio limón y agrega unas gotas de aceite de oliva”, recomienda la esteticista Cristina Álvarez.