Las francesas son expertas en dar la vuelta a los básicos, en convertir un rojo de labios en una declaración de intenciones y en conseguir hacerse un hueco en tu memoria incluso cuando llevan unos anodinos jeans y una camiseta blanca.
El fenómeno Damas comenzó con un blog, pero no piensen en una página al uso llena de looks perfectos, poses estudiadas y prendas convenientemente acreditadas. Nada más lejos. Su blog, que está más cerca de un Tumblr bonito y estético, es un catálogo interminable de fiestas pequeñitas en deliciosos pisos del centro de París, de tardes de finales de verano que acaban en una playa cualquiera (que no tiene por qué ser bonita) y de momentos normales camuflados de instantes mágicos. Su crew parisina ayuda bastante: Simon Porte (diseñador de Jacquemus), Louis Marie de Castelbajac u Olivier Zahm son algunos de sus compañeros de aventuras habituales.
El resto lo hace su estilo: una mezcla entre el armario de Jane Birkin –pantalones vaqueros de campana con talle alto, camisetas de algodón ajustadas, minivestidos sencillos...–, con el de Charlotte Gainsbourg –blazer perfectas, bolsos icónicos y sandalias planas–. Esa mezcla perfecta ha hecho de Jeanne Damas la chica que todos quieren, la it girl a la que invitan a todos los desfiles, la que reclaman para todas las fiestas y todas las colaboraciones. Y viéndola mirar detrás de ese flequillo peinado no podemos evitar pensar que Alexa tiene los días contados.