Los espectadores de Divinity pueden verla cada noche en 'Me robó mi vida' dando vida a Nuran, pero Yeşim Ceren Bozoğlu es una reconocida actriz turca con una dilatada carrera que comenzó en 1998. Desde ese momento, la intérprete ha logrado consolidar una carrera, que alcanzó su momento más brillante con la ficción emitida por Divinity, donde tenía uno de los papeles principales, un personaje clave en el desarrollo de la trama.
Sin embargo, pese a todo el éxito que ha cosechado a lo largo de estos años de carrera, la actriz ha vivido momentos realmente difíciles. Así se lo confesó a Seyhan Erdağ en su programa. En una sincera entrevista, reveló que ha sufrido mucho. "Me pasaron todo tipo de traiciones, fraudes y engaños que se puedan imaginar. Además, pasé por un proceso de bancarrota muy serio. Un día me di cuenta de que me quedaban 3 liras turcas en el bolsillo'', reveló la actriz.
La situación era dramática y no le quedó más remedio que recurrir a lo poco que tenía para salir adelante. ''Intenté sobrevivir vendiendo las pertenencias de mi abuela", recordó la actriz, que no sabía cómo salir de esa complicada situación. "Pesaba 110 kilos, estaba en paro, no tenía dinero, pero sí mucho orgullo y no sabía cómo pedir ayuda''. Nada iba bien en su vida. ''Toqué fondo, vi el punto cero. Lo que pasé fue una verdadera prueba.''
Fue entonces cuando tomó una drástica decisión. ''Después de este difícil proceso, de repente empecé a reflexionar sobre mí misma. Empecé a trabajar en eso. Trabajaba día y noche sin dejar ningún espacio privado para Yeşim", contó la actriz que fue en ese momento cuando decidió hacerse una operación de estómago y cambiar el rumbo de su vida. "Dejé atrás los problemas y el peso. Ahora los recuerdo de vez en cuando y digo 'Gracias a Dios", contó.
La imagen que luce a día de hoy nada tiene que ver con la que lucía durante el rodaje de 'Me robó mi vida'. Fue tras el éxito de esta ficción cuando ella tocó fondo y tomó la decisión de cambiar su vida. Su aspecto no le gustaba y pasó por quirófano. Tras una reducción de estómago y una dieta muy estricta, la actriz logró perder 58 kilos. Un cambio físico con el que también experimento un cambio en su estado de ánimo. Yeşim Ceren Bozoğlu por fin se reconocía y se veía bien.
Su transformación impactó a todos en Turquía. Empezando por sus padres, que no la reconocía. Y sus fans siguen impactados. Cada imagen que comparte en sus redes sociales se llenan de 'me gusta' y comentarios en los que siguen preguntándose en cómo lo ha logrado. "Regresaste 20 años atrás", le dicen algunos en sus redes cuando la ven.