Demet Özdemir, a quien los espectadores de Divinity podrán ver a partir del 1 de abril a las 22:45 horas en 'Mi nombre es Farah', se ha convertido en una de las estrellas turcas con más proyección internacional. Desde que protagonizar a 'Erkenci Kus' junto a Can Yaman, la intérprete ha copado las primeras páginas de las revistas y su fama ha traspasado fronteras. Prueba de ello es la portada que ha protagonizado en una de las publicaciones más importantes de la India.

Su papel de Sanem Aydın lanzó su carrera y supuso un antes y un después tal y como ella misma ha reconocido. "Sana Bir Sır Vereceğim ('Te contaré un secreto') es el comienzo de mi carrera y 'Erkenci Kuş' es mi punto de inflexión porque alcanzó grandes audiencias en todo el mundo", ha contado la actriz, que desde que terminó la ficción en 2019 ha consolidado y ha dado un giro a su carrera, dejando atrás la etiqueta de 'reina de la comedia romántica'. Demet Özdemir ha demostrado su versatilidad y ha explorado nuevos registros, haciendo con éxito el tránsito al drama con 'Mi hogar, mi destino' y ahora con 'Mi nombre es Farah', su último proyecto. Precisamente esta ficción ha sido la que la ha llevado a la portada de 'Hi Celeb Magazine'.

La actriz protagoniza un espectacular posado para esta publicación, con la que se ha sincerado sobre su carrera y su éxito. Un éxito que la hace sentir afortunada. "Es increíble ser amado y cuidado por personas de culturas completamente diferentes, a miles de kilómetros de distancia", ha comentado la actriz, que pese a estar en la cima de su carrera mantiene los pies en el suelo y sabe que esa situación puede cambiar en cualquier momento. "Me doy cuenta de que esta situación es temporal. Este amor y atención pueden trasladarse a otra persona mañana".

Aunque ha protagonizado varios éxitos y ha alcanzado el reconocimiento internacional, cree que aún la queda mucho por aprender y por mejorar. "Mi sueño y mi objetivo es convertirme en una gran actriz. Si tengo que llorar o parecer "feo" para un papel, lo haré. Si me preocupo por quedar bien ante la cámara, siento que no haré lo que requiere el papel y estaré traicionando mis sueños", ha contado la protagonista de 'Mi nombre es Farah'.

Demet es una mujer comprometida con su trabajo y ha reconocido, que pese a que algunos de sus personajes le han dado más reconocimiento y fama, todos han sido importantes. "Todos los personajes que interpreto son parte de mí y los amo a todos", ha contado Özdemir, que ha revelado que además uno de ellos le ha aportado una destreza muy especial. "Aslı', a quien interpreté en 'Con olor a fresas' ('Çilek Kokusu') , era un personaje más cercano a mi corazón. Esta serie también ha añadido una habilidad a mi vida personal: hacer pasteles preciosos", ha confesado Demet, a quien no le importaría hacer una incursión en la industria audiovisual india. "Colores, música, danza en Bollywood... Todo me seduce y disfruto viéndolo. Estoy abierto a sugerencias de películas y series de televisión en India".

Y ese mismo compromiso que tiene con su trabajo, lo tiene en su vida personal. Demet Özdemir es una mujer comprometida y solidaria. Consciente de su posición privilegiada, siempre está dispuesta a contribuir y apoyar a todos aquellos que la necesiten. Nunca ha perdido el foco y desde que ha alcanzado el éxito ha utilizado su fama para aportar su granito de arena. A lo largo de estos años la hemos visto colaborar con asociaciones que luchan contra el cáncer, ayudar a niños con enfermedades raras y otras muchas causas. De hecho, actualmente está involucrada en una campaña para facilitar educación a las víctimas del seísmo que asoló Turquía en febrero de 2023 a consecuencia del cual 1 de cada 5 estudiantes del nivel de educación básica se vio afectado (según las estadísticas del Ministerio de Educación Nacional) y cientos de miles de jóvenes se han enfrentado al riesgo de no poder continuar su vida educativa. Demet lo tiene claro. "Si no fuera actor, sería un activista que lucharía contra la injusticia".