Temple llega a la casa de Jason. Lo primero que se encuentra es una cocina en malas condiciones: el yeso se cae de las paredes, los azulejos son horribles, el suelo está destrozado y los armarios se están desprendiendo de la pared. A Temple le gusta la idea de Jason de dejar las vigas del techo al descubierto. La cocina necesita además, una campana extractora.