La lechada es una mezcla de arena fina y cemento que extendemos sobre las baldosas para rellenar los huecos y ayudar a sellarlo. Es necesario pasar al menos dos capas de lechada. Hay que rellenar bien los huecos y que quede bien pegado al suelo sino al caminar se agrietará. Es importante limpiar lo que sobra con una esponja bien limpia.