Tras estar más de 100 días sin competir, Carlos Alcaraz volvía a la pista y lo hacía por todo lo grande. El murciano se hacía con el primer título de la temporada tras ganar el Argentina Open. No obstante, antes de su regreso a la competición, el murciano quiso abrirse en canal en una entrevista para Vogue, hablando con este medio de algunos aspectos inéditos de su vida privada. El tenista se sinceró sobre la mala racha que atravesó tras ser el número 1 del mundo, el trabajo que ha hecho con su psicóloga, su ruptura con María González e incluso ha confesado el problema que tiene para encontrar novia.
El de Palmar, en un primer lugar, explicaba en esta charla que los últimos meses han sido bastante duros. Tras llevarse su primer Grand Slam en el US Open y convertirse en el número uno más joven de la historia, el deportista de élite se tuvo que alejar de la pista más de cien días al encadenar dos lesiones. “Tú eres quien mejor conoce tu propio cuerpo. Sé cuáles son mis límites, cuándo tengo que parar, cuándo tengo que esforzarme. He aprendido a hacerlo. Es mejor parar a tiempo para recuperarse lo antes posible. Parar a tiempo también es una victoria”, reflexionaba sobre esta etapa Alcaraz.
“Parece que me lo estoy inventando, realmente disfruté mucho ese momento, pero la verdad es que cuando tuve que volver a competir, volví a sentir el estrés. Quizá no asimilé del todo lo que había pasado, o quizá, instintivamente, perdí un poco la esperanza", añadía. Una etapa que el tenista gestionó con la ayuda de Isabel Balaguer, su psicóloga, quien lleva su caso desde la adolescencia: “"Estaba un poco desorientado. No controlaba bien mis emociones, me enojaba mucho. Cuando tenía 15 o 16 años tiraba bastante las raquetas, o rompía alguna, y eso ponía en riesgo mi juego. Sabía que tenía que mejorar en ese aspecto".
El joven de 19 años también se sinceró sobre su vida personal. Comentó a la citada revista que lleva 18 meses soltero (confirmando de este modo su ruptura con la tenista María González tras meses de especulaciones) y confesó que le cuesta mantener una relación de pareja por sus obligaciones. “Es difícil encontrar a la persona que pueda compartir cosas contigo si siempre estás en diferentes partes del mundo”, explica Alcaraz, que no es muy dado a hablar de su vida privada.