Arantxa Sánchez Vicario confiesa su delicada situación económica: "Saco adelante a mis hijos con el dinero de mis amigos"
Este martes, Arantxa Sánchez Vicario se sentará en el banquillo de los acusados
La extenista y su exmarido, Josep Santaca, están acusados de supuesto alzamiento de bienes
En una entrevista a El País, la deportista ha hablado de su precaria situación económica
"Estoy como un flan", admite Arantxa Sánchez Vicario horas antes del juicio que la obliga a sentarse este martes en el banquillo de los acusados contra su exmarido. La extenista y el padre de sus hijos, Josep Santacana, se acusan mutuamente de ocultar bienes para no hacer frente a la deuda de 7,5 millones de euros que le reclama el Banco de Luxemburgo y por el que les piden una condena de cuatro años de cárcel.
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La vista oral durará una semana y es para la deportista "el partido a cinco sets más largo" de su vida. Así lo ha confesado en una charla a El País, en la que también cuenta que hace dos años asumió su responsabilidad, se mostró arrepentida y, al afirmar haber sido víctima de su exmarido, confía en que la colaboración con la justicia le permita minimizar la pena que se le imponga.
La extenista dice que estaba "enamorada", confió en su marido y por eso se ha visto "inmersa en esta situación". Ambos se separaron en el año 2018 y ella vive con sus dos hijos en un piso en alquiler en Miami, en Estados Unidos. En la entrevista el medio citado cuenta que tiene dificultades económicas y que su trabajo, actualmente, es dar clases particulares de tenis y que a veces la contratan para ayudar en la organización de torneos o como comentarista.
La situación económica de Arantxa Sánchez Vicario
Sin embargo, la mitad de sus ingresos van directamente a las arcas del Banco de Luxemburgo para pagar la deuda. En estos últimos años, la deportista ha entregado 1,9 millones de euros. De esa cantidad, 700 mil euros proceden de la "libreta de campeones", un producto financiero que está reservado a medallistas olímpicos. Arantxa ganó cuatro, por lo que le corresponde percibir unos 6.000 euros al mes que ha destinado a su deuda. "Estoy haciendo un esfuerzo económico brutal, que seguiré haciendo toda mi vida", ha contado al medio citado anteriormente.
Con los ingresos que le quedan disponibles no alcanza para mantener a sus dos hijos, a los que saca adelante "gracias" al dineo que le dejan sus amigos. "Con eso voy tirando", ha confesado la deportista. Arantxa Sánchez Vicario considera "muy injusto" no poder vivir del tenis, el deporte al que se ha dedicado toda su vida y que le habría permitido vivir sin complicaciones. "Con lo que he ganado, no poder vivir del tenis es un golpe muy duro que no me esperaba. Mi error, como he dicho otras veces, fue enamorarme. Confié en la persona que tenía al lado, en mi marido, y me la jugó. No voy a tirar la toalla. No lo hice en la pista y no lo haré ahora. Estoy en una etapa dura de mi vida, pero el deporte me ha ayudado a enfrentarme a las adversidades, a ser fuerte y resiliente", confiesa horas antes de sentarse en el banco de los acusados.
Arantxa y Leo, los dos hijos de Arantxa Sánchez Vicario
Arantxa Sánchez Vicario y Josep Santacana estuvieron juntos diez años y tienen dos hijos en común a los que puedes conocer más en el vídeo que encabeza esta noticia. Arantxa, que tiene 14 años, y Leo, que tiene 12 años. A pesar de tener dos menores en común, su divorcio saltó por los aires y la relación entre ellos es una auténtica guerra judicial y mediática que dará comienzo este martes.