A Cristina Blanco, madre de Miguel Ángel Muñoz, le han amputado una pierna, según Semana

La revista Semana publica este martes el complicado episodio de salud que está atravesando Cristina Blanco, la madre de Miguel Ángel Muñoz. Según el medio citado, la que fuera vidente en los años noventa se encuentra ingresada en un hospital de Madrid desde hace un mes. Fuentes cercanas a la protagonista confirman que, aunque "ahora está estable", "la han tenido que operar y le han amputado una pierna".

Las personas cercanas a Cristina Blanco cuentan que su estado era delicado y está previsto "que le den el alta en los próximos días". En estas últimas semanas, la madre de Miguel Ángel Muñoz ha recibido tratamientos especializado con el fin de intentar "colocar una prótesis", algo que por el momento parece que "no será posible". Debido a las dificultades que puede tener para valerse por sí misma, su hijo le habría buscado un centro que proporcione cuidades para este tipo de pacientes una vez salga del hospital en el que se encuentra. "Él, por su trabajo como actor, lo tiene difícil para atenderla y no puede acompañarla las 24 horas", dicen a Semana personas cercanas a la familia.

Miguel Ángel Muñoz, muy preocupado por su madre

Según cuenta el medio citado anteriormente, el actor "se ha preocupado muchísimo por su madre" y ha ido a verla "casi todos los días". "No la ha dejado sola en ningún momento y ha acudido a todas y cada una de las reuniones con sus médicos para conocer de primera mano los datos sobre su evolución", cuentan.

Hace unos años, en una charla con Risto Mejide, Miguel Ángel Muñoz habló de su madre. El intérprete contó que ella "decidió apartarse y quedarse en un segundo plano, prácticamente invisible" para que él no tuvieran que hacerle ese tipo de preguntas, algo que le agradecería siempre.

A este complicado momento personal se suma la muerte de su tata, la persona que ha cuidado del actor desde que era pequeño. El actor publicó el pasado mes de julio una extensa carta en sus redes sociales en la que se despedía de los 40 "privilegiados" años que había vivido con ella. "No sé si algún día llegaré a entender el vínculo tan especial que hemos tenido convirtiéndose en la historia de amor más especial que habré vivido nunca. Te doy las gracias por cuidarme tanto y tan bien. Por trasmitirme unos valores tan importantes y sobretodo por enseñarme a amar de de una manera tan profunda como lo hemos hecho ambos durante todos estos años", dijo emocionado tras su muerte.