Hace tres semanas que comenzó en Tailandia el juicio que dirimirá si Daniel Sancho es o no culpable del asesinato premeditado del cirujano colombiano Edwin Arrieta. Tras meses de investigaciones, comienza una nueva fase del proceso que se inició el pasado mes de agosto. En estos meses, el chef ha permanecido en la cárcel de Koh Samui, guardando prisión provisional desde que confesase su implicación en el crimen, algo que posteriormente matizaría, apuntando que se produjo de forma accidental durante una pelea. Mientras, la prensa española ha analizado hasta el último detalle de la instrucción del caso, esperándose con interés las imágenes del hijo de Rodolfo Sancho. Hoy, con motivo de su declaración, hemos podido verle de nuevo.
No son las primeras imágenes del hijo de Rodolfo Sancho y Silvia Bronchalo desde que fuese detenido el pasado verano, ya que, anteriormente, se le había visto fugazmente en sus traslados a los juzgados. Siempre habían sido fotografías o vídeos generalmente poco claros, sin nitidez, a distancia, con el rostro parcialmente tapado por una mascarilla. En esta ocasión, el material que ha emitido 'Vamos a ver' en exclusiva hace unas horas es de mejor calidad y permite comprobar su cambio físico en estos meses.
El programa de Telecinco ha difundido una grabación de Sancho durante su llegada a la Corte tailandesa, donde prestará declaración previsiblemente durante la décima sesión del juicio. El periodista Álvaro López, enviado especial del programa, ha narrado que esta mañana, y a diferencia de ocasiones anteriores, Daniel ha llegado en un furgón con los cristales sin tintar, lo que ha permitido ver al nieto de Sancho Gracia, de veintinueve años, con una cierta claridad. En ellas, se le puede ver en compañía de otro preso, vistiendo un mono granate, esposado al techo y sin mascarilla esta vez. La secuencia da cuenta, además, de su nuevo aspecto: delgado, con el pelo corto de color castaño, y algo de vello facial en el rostro.
El juicio que se celebra en Tailandia, que tuvo que suspenderse durante los últimos días debido a unos problemas relacionados con el aire acondicionado de las instalaciones, determinará si Sancho es culpable o no del asesinato premeditado de Sancho, así como de otros dos delitos: el descuartizamiento y ocultación de su cadáver, y destrucción de documentación ajena (en concreto, el pasaporte de Edwin). El hijo de Rodolfo Sancho, que este mes concedía su primera entrevista para un documental de HBO sobre el caso, sincerándose sobre lo que ocurrió, solo reconoció ser culpable de la ocultación del cuerpo, declarándose inocente de los otros dos.