María Pombo muestra las consecuencias físicas de su aparatosa caída con su hija Vega

En el año 2012, María Pombo comenzó a dedicarse a las redes sociales y a día de hoy, se ha convertido en uno de los rostros más reconocidos del ámbito. La influencer acumula en su perfil público de Instagram más de tres millones de seguidores con los que comparte aspectos de su vida profesional, así como de la personal. Hace unos días, se sinceraba acerca del accidente que había sufrido mientras llevaba a su hija en brazos, sin embargo, no ha sido hasta ahora cuando ha mostrado las consecuencias.

“Experta en hacer de lo simple algo extraordinario”. Así titula María el vídeo capturado hace tres días por las cámaras de seguridad situadas en las afueras de su residencia y en el que, tras cerrar la puerta trasera de su coche y mientras sujetaba a Vega, de 1 año, en brazos, se tropieza con una caja que permanecía detrás de ambas.

Pombo, que en las imágenes termina cayendo al suelo tras el incidente, sostiene en todo momento a la pequeña, evitando así que sufra algún traumatismo por la caída. Tras ello, su marido y padre de la menor, Pablo Castellano, corre hacia ambas para socorrerlas. También lo hace posteriormente Martín, de 3 años, que hasta entonces se encontraba en el interior del vehículo.  

Aunque a lo largo de los segundos que ha mostrado, la familia al completo termina entrando en su domicilio sin ningún tipo de problema mayor, el suceso sí que ha acabado sin embargo con varios moratones en el cuerpo de la creadora de contenido, que ella misma ha querido enseñar ahora a través de sus historias temporales. En la instantánea compartida, posa desde el sofá de su casa con un vestido que deja ver los cardenales que han aparecido en su extremidad inferior derecha en las últimas horas: “Qué guay”, reza el sticker que ha añadido y con el que ha puesto un toque de humor a los hechos por los que no han tenido que lamentar más daños.

De hecho, en las últimas horas el arquitecto ha publicado también otro vídeo en el que bromeaba sobre las secuelas. "Gordi, ¿mañana empezamos a entrenar?", preguntaba a su mujer. Una cuestión a la que la madrileña respondía de nuevo con tono sarcástico: "No puedo, no entreno porque me duele la muela. Me ha dicho el médico que tengo que estar en reposo 30 días", respondía ella.