A sus 71 años, Ernesto Augusto de Hannover ha vuelto a ser noticia, esta vez por motivos de salud. Jefe de la antigua Casa Real de Hannover y bisnieto del emperador Guillermo II, el aristócrata germano-británico-austriaco reside desde hace años en Madrid. En España es más conocido por su matrimonio con Carolina de Mónaco, con quien tuvo a su hija Alexandra, aunque también es padre de otros dos hijos, Ernesto y Christian, fruto de su primer matrimonio con Chantal Hochuli. Su separación de la princesa monegasca nunca fue oficializada, pero ambos llevan vidas separadas desde hace años. En los últimos tiempos, Ernesto ha formado una discreta pareja con la artista Claudia Stilianopoulos y parecía haber encontrado cierta estabilidad, pese a los altibajos de salud y las tensiones familiares, especialmente con su hijo mayor. El deterioro de su estado físico tras una operación de cadera a finales de 2024 preocupó a su entorno, y aunque recientemente se le había visto reaparecer en una reunión familiar, la tranquilidad ha durado poco.

El príncipe Ernesto se encuentra ingresado en la clínica Ruber Internacional de Madrid desde la madrugada del pasado jueves 3 de abril. Acudió a Urgencias por su propio pie, pero su estado hizo que el equipo médico decidiera mantenerlo hospitalizado desde entonces. Aunque no ha trascendido un diagnóstico concreto, la prolongación del ingreso ha generado inquietud entre sus allegados. La noticia no se conoció hasta varios días después. Fue el círculo más cercano del aristócrata quien dio la señal de alarma con su presencia constante en el centro hospitalario. 'Vanitatis' ha publicado en exclusiva las imágenes de su novia, Claudia Stilianopoulos, su hijo Christian de Hannover y su nuera, Sassa de Osma, quienes no se han separado de él durante el fin de semana. El sábado se pudo ver a Christian y Claudia saliendo brevemente del hospital para descansar en una terraza cercana, ambos con el semblante serio. Poco después se les unió Sassa, con quien intercambiaron impresiones sobre la evolución del príncipe. El domingo, volvieron a ser vistos entrando y saliendo del hospital, esta vez con semblantes serios.

Este nuevo episodio se produce apenas unas semanas después de que la prensa alemana alertara sobre el “alarmante deterioro de salud” del príncipe, cuyas últimas apariciones públicas habían dejado ver su dependencia de un andador tras la operación de cadera a la que se sometió en diciembre. Aunque se trataba de una intervención inicialmente rutinaria, Ernesto tuvo complicaciones y la recuperación fue más lenta de lo esperado. Tras una primera operación en noviembre sin los resultados esperados, volvió a pasar por el quirófano, pero la rehabilitación no logró devolverle la autonomía por completo. El pasado 21 de marzo, durante la celebración del cumpleaños de su nuera Sassa, se le vio por última vez en público. En aquella ocasión ya no usaba andador, aunque aún se apoyaba en un bastón.

Ahora, Claudia, quien no se ha separado del hospital, ha actualizado el estado de salud del aristócrata y afirma que se debe a una complicación en la recuperación de la última intervención de cadera de Ernesto y que se desconoce cuándo recibirá el alta. Aún así, la hija de Pitita Ridruejo, ha confirmado a 'Informalia' que está recibiendo un tratamiento. Por su parte, dice que el alemán se encuentra "tranquilo" y que su "estado de ánimo es optimista".

Lejos de las grandes casas reales europeas, Ernesto lleva ya años instalado en Madrid, donde reside en una urbanización de lujo cercana a la de su hijo Christian. En esta etapa de su vida ha buscado mayor discreción, aunque sus antecedentes siguen marcando su imagen pública. En 2020 protagonizó un episodio especialmente grave que terminó con su ingreso en una clínica psiquiátrica tras mostrarse agresivo con la policía. A esto se suma un largo historial de incidentes relacionados con el consumo de alcohol y altercados en distintos países.

En lo personal, sin embargo, su entorno parece más estable. Mantiene una relación consolidada con Claudia Stilianopoulos, hija de Pitita Ridruejo, con quien comparte vida y amistades en la capital española. Pese a que nunca ha formalizado su divorcio de Carolina de Mónaco, su vida sentimental está volcada desde hace tiempo en esta nueva pareja, con quien ha sido visto en distintos eventos sociales.

Sus relaciones familiares, no obstante, siguen siendo complejas. Con su hijo mayor, Ernesto, mantiene un contencioso abierto por la gestión del legado familiar, que llegó incluso a los tribunales alemanes. En cambio, con Christian ha logrado mantener una relación cordial. Ambos comparten vida en Madrid y es habitual que pasen tiempo con los hijos del matrimonio formado por Christian y Sassa. En cuanto a su hija Alexandra, fruto de su unión con Carolina, los medios internacionales señalan que el contacto es prácticamente nulo.

Suscríbete a la newsletter de Divinity y recibirás toda la información de celebrities y corazón cada semana en tu mail