"Cómo puede cambiar tu vida de un día para otro". Esta fue la reflexión que sacó Antonia Dell'Atte de un gravísimo accidente que estuvo a punto de quitarle la vida. Mientras disfrutaba de un tranquilo día de playa, una sombrilla salió volando y se dirigió hacia ella "como un misil". Fue "un milagro" que la situación se quedase en un susto, pero las secuelas de aquel incidente la marcaron. Una reconstrucción de la mandíbula inferior le trajo consecuencias tanto a nivel salud como a nivel estético. Y hoy, tres meses después de aquello, ha decidido quitarse la mascarilla y hablar de su realidad para la revista ¡Hola!

"Ya no soy un monstruo, pero esta cicatriz ‘divina’ me ha cambiado la vida", ha reivindicado. En esta sincera entrevista donde la vemos tapar ligeramente las marcas con su mano y una rosa, la italiana recuerda el trauma que le quedó de ese suceso. "Una mano desde arriba que me quiere la desvío", aseguró en su día aliviada. "Pensé que nunca volvería a ser la que fui, pero, ahora, renazco y soy como el Ave Fénix, aunque no estoy preparada para enseñar mi nueva cara", ha manifestado ahora con rotundidad.

Desde entonces, el Instagram de la exmujer de Alessandro Lequio ha continuado activo con normalidad. En él hemos podido seguir sus vacaciones (atípicas, como las de todos), sus profundos posts en los que manifiesta su devoción católica o las muchas advertencias en las que anima a la sociedad a que se cuide ante la pandemia. La única excepción que rompió este aura de calma y paz fue la polémica ausencia de Clemente, su hijo, en el funeral de su hermano Álex. Algo que hace unas semanas se encargó él mismo de aclarar.

"De la muerte de mi hermano yo no hablo más. Yo de eso no hablo. Es un tema delicado y he sufrido mucho. He estado viviendo aquí encerrado en cuarentena, sabiendo que a mi pobre hermano le faltaban semanas de vida", ha querido dejar claro, harto del acoso mediático que sufre por parte de la prensa española. Desde Estados Unidos, donde vive con su mujer, el único hijo del conde y Antonia Dell'Atte ha asegurado que la muerte de Álex Lequio fue "un trauma" que le está costando superar.

En cuanto a la relación con su padre, con el que varios medios le habían tratado de distanciar, el joven ha zanjado el debate desvelando que con él no tiene ningún problema desde entonces y que hablan cada día. En su mente no está hacer ninguna exclusiva hablando de su vida privada. "Lo explico por aquí y no lo vendo", ha defendido con rotundidad en un vídeo compartido en su Instagram.