David Bisbal ya es uno más de los vips que han sido duramente criticados en redes por culpa del coronavirus. A modo de recomendación, el cantante compartía hace unas horas un tuit en el que se difundían una serie de datos para mantener el sistema inmunológico reforzado y disminuir la posibilidad de contagio.
“Esto tiene sentido”, escribía el almeriense, que animaba a sus seguidores a que tomasen vitamina C complementada con vitamina D y glutatión. Junto a sus palabras, el artista adjuntaba el vídeo de un médico italiano cuyas palabras, tal y como se ha podido comprobar a posteriori, no tenían ningún tipo de evidencia científica.
“David, borra esto por favor”, le pedía minutos después una fan que le acusaba de estar difundiendo desinformación con este mensaje. Esta usuaria le recordaba que es cosa de los expertos en epidemiología y medicina el dar herramientas a la ciudadanía para enfrentarse a esta pandemia.
“Las recomendaciones médicas deben darlas las autoridades, no un vídeo de Youtube”, aportaba otro tuitero, que abogaba por la “responsabilidad” de los rostros populares ante una situación de alarma como la que está haciendo frente nuestro país.
Su primera reacción ha sido eliminar el post. Un día más tarde, esta vez a través de sus stories, David Bisbal se ha grabado desde la casa que comparte con su mujer Rosanna Zanetti para unirse al hashtag #YoMeQuedoEnCasa.
“Hola, mi gente. Espero que estéis todos bien”, deseaba a sus casi cuatro millones de seguidores en Instagram. En este vídeo se ve en su jardín contando que está aprovechando este aislamiento preventivo para “estudiar y aprovechar el tiempo”. En definitiva, aprovechar para afrontar esas tareas que no ha podido asumir a lo largo de los últimos meses por motivos laborales.
Es uno de los mantras que se está repitiendo estos días: que los vips sean responsables y utilicen su altavoz de forma apropiada. La influencer Paula Gonu, que acumula más de dos millones de seguidores fieles, se convertía en Trending Topic esta semana por un polémico vídeo en el que transmitía algunos bulos sobre cómo enfrentarse a un posible contagio por coronavirus.
Desde su domicilio, la instagramer recomendaba (más allá de la tan importante higiene de manos) beber agua caliente a más de 27 grados. Una afirmación que provocó que tiempo después entonase el mea culpa, asumiendo que había difundido uno de los muchos bulos que se están extendiendo sobre el Covid-19.