Los derechos trans son derechos humanos. Y desde hoy tienen una ley que los avala. Con su aprobación en el Consejo de Ministros, España da "un paso de gigante en los derechos LGTBIQ+", con grandes cambios como que las personas trans dejen legalmente de ser consideradas enfermas o que se permita el cambio de sexo a partir de los 14 años sin necesidad de informe médico ni testigos. Pero para alcanzar este hito debemos ser justos y dar las gracias a esas personas que pelearon sin recibir nada a cambio. A las que dieron voz a la lucha cuando era una realidad marginal. A las que dedicaron su vida a la visibilidad, a mostrarse tal cual eran para que hoy podamos hacerlo nosotros. A las que nos hicieron libres.
Desde Divinity queremos unirnos a la celebración homenajeando a nuestros rostros más visibles. Estos habituales de la prensa y la televisión han contribuido, cada uno a su manera, a que las personas trans cuenten con el respeto de la sociedad y el apoyo de las leyes. Y no hay un día mejor para reivindicarles.
Fue la primera. O por lo menos la única que logró visibilidad. Durante décadas, Bibiana Fernández era nuestra referencia patria de la reasignación de sexo fuera de los límites de la marginalidad. Nadie daba el paso cuando ella lo dio. Y menos aún lo contaba. En los setenta, cuando se empezó a ganar la vida en los cabarets de Barcelona e inició una carrera como actriz de la mano de Almodóvar o Vicente Aranda, para el que protagonizó 'Cambio de sexo' junto a Victoria Abril, "todo el mundo susurraba" a su paso. Pero era un peaje que quiso pagar para ganar en libertad. "Llegó un momento en el que había que sacrificar lo que fuera. Tienes que elegir entre el mundo y tú. Y entre el mundo y tú, siempre te eliges a ti", le contó a Bertín.
Del ser visible por el mero hecho de estar, de mostrarte, Carla Antonelli dio un salto al llevar la lucha trans a la política. No era suficiente con que la sociedad supiese de esta realidad. La causa merecía ser reivindicada para ganar unos derechos que de aquella eran inexistentes. De ahí que esta actriz canaria que ya participó en 1980 en un documental sobre la transexualidad continuase su labor por el colectivo desde varias asociaciones de transexuales. En 1997 entró a formar parte de forma activa en el PSOE y en 2011 se convirtió en la primera mujer trans en acceder a un cargo de representación parlamentaria en España.
Argentina de nacimiento, llegó a España por supervivencia para participar en un intercambio cultural argentino-español en el que intervino el centro de arte EGO y la Universidad Laboral de Gijón. Y fue aquí donde al fin logró construir su identidad. Topacio Fresh, galerista de arte de primer nivel, colaboradora televisiva y una fija de la noche madrileña, donde es habitual verla con sus amigos Alaska y Mario, regenta junto a su marido LaFresh Gallery, un espacio donde dar hueco a jóvenes talentos que ya lleva más de medio centenar de muestras desde su inauguración en 2008. Ella también es un referente para muchas.
El tiempo le ha dado a Cristina el lugar que nunca pudo ocupar en vida. La tristemente desaparecida vedette consiguió dar visibilidad a un colectivo condenado al ostracismo y la marginalidad: las prostitutas transexuales. Gracias a su buen hacer y a sus dotes comunicativas (porque no hace falta tener mucho vocabulario o una dicción perfecta para comunicar y llegar a la gente), consiguió acercarnos el día a día de su universo. Poner su realidad sobre la mesa. Su vida no fue fácil ni ejemplar, pero su arrolladora personalidad, su eterno carisma y su infinita sabiduría vital nos dejó un legado para la memoria colectiva de toda la nación que ya es historia del colectivo gracias a la serie 'Veneno'.
Ella es parte responsable de que Cristina hoy sea icono. La que ya es una de las periodistas más brillantes de la escena actual fue la encargada de firmar la biografía de su ídola. Esa que los Javis llevaron a la pequeña pantalla. Y su impacto en la vida de este icono 'trash' fue tal que su vida sea coprotagonista de esta producción internacional. Erudita en cultura pop, Valeria Vegas es habitual en coloquios y conferencias sobre el tema. Su Instagram, una fuente hemeroteca del corazón en sí mismo, merece ser visitado diariamente. Y su último libro, 'Libérate', es el manual que merecía el colectivo para poner cara a esos nombres que nos ayudaron a caminar.
Y como si esta lista fuese un efecto dominó, ahora toca pararse en ellas. En Isabel Torres, Daniela Santiago y Lola Rodríguez. Las primeras, hasta hace un año desconocidas para el gran público, son las actrices que se pusieron en la piel de Cristina en su madurez y juventud para la serie de Calvo y Ambrossi. La tercera es Valeria Vegas en la ficción. Su increíble trabajo interpretativo fue una forma de demostrar el talento trans que durante décadas hemos dejado escapar por esa falta de visibilidad que hasta ahora mantenía al colectivo en los márgenes de la industria audiovisual. Hoy son tres de las actrices con mayor proyección del momento.
Aunque también participó en 'Veneno' dando vida a la Cristina que llegó de Adra a Madrid con un sueño por cumplir, su nombre merece hacer un punto y aparte en esta lista. Actriz, cantante, influencer y activista del colectivo LGBTBIQ+, King Jedet llegó a nuestras vidas en 2016 gracias al poder de internet. Rápidamente demostró ser una 'show woman' de nueva generación. Y cuando compartió con el mundo se decisión de llevar a cabo una transición, ser testigos de su experiencia, con sus altos y bajos, nos ayudó a comprender la dureza que implica la búsqueda de una identidad.
Ser la primera mujer trans en convertirse en Miss Universo España ya es motivo más que suficiente para que Ángela Ponce, modelo sevillana, forme parte de esta lista. Tras romper esta barrera, la joven ha colaborado en la normalización de su realidad en la moda.
Estos últimos días se está demostrando que la comedia será feminista o no será, por mucho que algunos pretendan retroceder la tendencia. Y prueba de ello la encontramos en Elsa Ruiz, humorista y colaboradora de televisión, cuyas intervenciones en redes son una masterclass para cualquiera que quiera reírse y aprender sobre el colectivo.
Su trayectoria como actriz, guionista y directora es larguísima. También como icono. Y lo que le queda. Después de colarse como presa en ‘Vis a vis’, serie que le dio la fama y que permitió que una persona trans copase horas de televisión, Abril Zamora ha llegado a trabajar con la mismísima Sophia Loren en ‘The Life Ahead’, cinta que le dio el Oscar a Laura Pausini por poner la banda sonora original.
Programas como 'Gran Hermano' también ha escrito una página en la normalización. Estábamos en la primera década del siglo XXI cuando, en horario de máxima audiencia, con millones de espectadores pegados a lo que sucedía en esas cuatro paredes, dos participantes del formato, Nicky en 'GH 6', Amor en 'GH 9' y Desy en 'GH 14', participaron en el programa de telerrealidad más importante de España para hacer ver desde la naturalidad de la convivencia y la vida cotidiana la realidad trans.
'GH' llevó lo trans al público masivo, pero ahora las audiencias millonarias están en redes. Concretamente en TikTok, donde dos rostros jóvenes han logrado introducir la causa entre los intereses de los centennials. Hablamos de Daniel Marrero Illescas, un joven madrileño, mecánico de profesión, con un millón de seguidores y pareja de la también influencer Marina Riverss. Y también de Daniela, una valenciana de 28 años que ha sabido divulgar con humor (y mucha razón) cómo es el día a día de una persona trans.
Mujeres como Valeria Vegas, que tanto han hecho por nuestra memoria LGTBIQ+, han ayudado a que precursoras como Manolita Fernández Pérez, conocida por todos como Manolita Chen, tengan su sitio en nuestra historia. Más allá de su pasado como estrella del cabaret de los setenta, su gran hito fue ser una de las primeras personas en España en conseguir que en su DNI figurase su identidad femenina. Además, en un momento en el que lo trans era invisible, también logró adoptar cuando no estaba permitido a María, una niña de tres años con Síndrome de Down que sigue bajo su tutela.
También merece un apartado Manuela Trasobares, mezzosoprano dramática, cantante de ópera, pero también pintora y escultora. Amante del barroquismo, ha cantado en Bratislava y Sofía (Bulgaria). Su "hemos de ser fuertes, nos debemos de unir todas" mientras tira una copa en un debate la televisión valenciana a finales de los 90 ya es un lema para el colectivo.