Iker Casillas no puede más. El excapitán del Real Madrid ha tomado una drástica decisión y ha anunciado medidas legales contra los medios de comunicación que difamen y publiquen noticias falsas o no contrastadas sobre él o la madre de sus hijos, Sara Carbonero. A través de un comunicado, Casillas ha querido además desmentir que su salud se haya resentido en los últimos días y niega haber tenido otro susto en el corazón, sino "un fuerte ataque de alergia".
"Ante las noticias publicadas en estas últimas semanas respecto a mi persona, me veo obligado a emitir este comunicado con la intención de aclarar diferentes aspectos relacionados con mi vida personal y la de mi familia", comienza diciendo el guardameta en su carta.
"El acoso mediático al que estamos siendo sometidos tanto mi familia como yo personalmente nos está generando un daño irreparable", añade en esta misiva, publicada tan solo unas horas después de que Iker estallase contra unos reporteros en plena calle. "Me gustaría recalcar que nuestra separación fue amistosa y en el comunicado que emitimos mi mujer y yo, pedimos respeto para ella, mis hijos y para mí. Lamentablemente no se está produciendo, reflejándose en un acoso permanente", añade.
Tras estas palabras, Iker se pone mucho más serio y recalca que sus abogados han iniciado los trámites pertinentes para poner fin a todas las 'fake news' que han estado publicándose desde que se anunciara su ruptura con Sara Carbonero: "Estoy cansado de ver a distintas personas que se inventan historias relacionadas conmigo, por lo que he tomado la decisión de que mis abogados inicien las correspondientes demandas dirigidas a quienes están difundiendo informaciones totalmente falsas y que deberán demostrar en los Tribunales de Justicia".
Iker continúa su denuncia pública, dejando claro que no va a dejar pasar por alto esta situación y que todas las "aseveraciones e informaciones falsas" tendrán que ser "demostradas en los próximos meses en los correspondientes Tribunales de Justicia", concluye mientras, una vez más, pide respeto para este sector "en el que nunca he participado ni personal ni profesionalmente".