Poco después de comenzar el año, Julia Otero recibía la peor de las noticias. Tras someterse a un control rutinario, los médicos le detectaron "unos centímetros de células egoístas, de esas que no procuran el bien común, que se olvidan y van por libre". En una llamada telefónica en su programa de radio, la locutora explicaba públicamente que debía retirarse temporalmente para comenzar un tratamiento de quimioterapia contra el cáncer. Pero tras unos largos meses de lucha, la periodista ha utilizado sus redes sociales para anunciar que está curada y que "falta poco" para retomar sus compromisos profesionales.
"Estoy viva y guerrera". Estas son las palabras que ha utilizado para anunciar que ya no tiene "células egoístas" en su cuerpo, una definición del profesor López-Otín que la acompañado a lo largo de este proceso. "Nuevo look. El pelo debilitado pedía un corte, y sí, más delgada. Os contaría la dieta tan exitosa, pero casi mejor que no la probéis nunca", ha escrito a través de su cuenta de Instagram. A lo largo de este proceso siempre la ha acompañado su familia, a quién puedes conocer más en este vídeo:
La locutora de radio ha aprovechado para agradecer "tantos mensajes de ánimo y cariño" que ha recibido a lo largo de estos meses de lucha contra el cáncer. Y no ha querido dejar pasar la oportunidad para recordar que aunque ya no quede "ni una célula egoísta" en su cuerpo, ya sabemos que tienen que transcurrir cinco años para dar "el asunto por zanjado".
Sus amigos y compañeros de profesión no han tardado en utilizar esta misma vía para seguir compartiendo mensajes de cariño y felicitarle por superar una dura enfermedad. "Qué maravilla verte. Y qué regalo será escucharte de nuevo", escribía Carme Chaparro. Sara Carbonero le mandaba aplausos y corazones. "Chau egoístas. Estamos esperándote para seguir celebrando la radio, la tele, la vida", comentaba Borja Terán.
La locutora, que ha ido trasmitiendo como se encontraba a través de las redes sociales, se ha mostrado siempre muy positiva por la evolución de su enfermedad. "Estoy muy bien, como una rosa. Después de dos meses de artillería pesada, los médicos han decidido darme un alto en el fuego", contó emocionada en su 62 cumpleaños. Paseos de siete y ocho kilómetros, o evitar la exposición al sol han sido algunas de las recomendaciones médicas que ha seguido a diario.