Hace exactamente tres años, mientras presentaba 'El viento no espera', Raquel Sánchez Silva nos contaba cómo había tenido que echar mano de sus "tripas" para enfrentarse a "todas las respuestas" que casi nunca se atreve a dar "fuera de un libro". Jugando con el título de esa novela en la que se quitó esa coraza emocional de la que a veces echa mano en la tele, la presentadora nos habló de sus "vientos", esas personas que le han ido "empujando" cuando la vida parecía tambalearse, las "que te sacan a navegar, te sacan de tu casa para luego poder defenderte". Y en este sentido, ahora al hablar de un nuevo reto profesional, se ha expresado a través de su Instagram.
En una publicación en la que ha compartido un vídeo tomado durante su última escapada a Argentina junto a su chico, Matías Dumont, que tiene sus raíces ahí, la extremeña ha recurrido una metáfora para demostrarnos cómo se enfrenta a los "desafíos" para que no se conviertan en obstáculos. En él la vemos escalando una montaña, chivándonos "el truquillo para subir hasta este primer escalón" que, como en todo, te ayuda a llegar a la meta.
"No es que esta sea la prueba más difícil de mi existencia, pero cuando ahora me veo escalando cualquier minipared pienso en todas las veces que tuve que subir y subir y subir para lograr imponerme en mis desafíos", ha escrito en este aplaudido post en el que, mientras sube la puerta de la Garganta del Diablo de Salta, nos ha permitido conocer un poco más a esa Raquel "valiente" de la que hablan sus amigos en los comentarios del mismo.
Fue durante esta escapada exprés en pareja cuando conocimos de su boca cuál es el pacto al que llegó con su familia política, que reside en Argentina, cada vez que van a visitarles, sobre todo desde que Sánchez Silva se convirtió en madre de mellizos junto a Dumont. Después de pasar unos días en Buenos Aires disfrutando de su compañía, la comunicadora y el productor siempre acostumbran a dejar a los pequeños Mateo y Bruno con la rama paterna para poder desconectar los dos solos.
Una costumbre que, por culpa de la pandemia, llevaban sin llevar a cabo desde 2019 y de la que por fin, con plena emoción por su primer viaje transoceánico desde que el mundo se paralizó por el coronavirus, pudieron disfrutar en febrero de este año. "Pasábamos varios días en Buenos Aires, con mi familia política, y luego les dejábamos a los niños y nos íbamos nosotros dos a pasar unos días a los destinos más bonitos de Argentina para conocer un poco más el país", contaron antes de poner rumbo a ese país al que le une un "vínculo emocional, amoroso y familiar" desde que conoció al padre de sus hijos.