Si de algo puede presumir Tania Llasera es de ser muy natural. A través de sus redes sociales, tal y como reza su biografía, lucha por visibilizar “lo normal, lo real y lo que hay”. Es habitual verla hacer público sus cambios de peso - de los que siempre está orgullosa -, sus problemas y alegrías con la maternidad, o los bajones que sufre por la situación que ha provocado la pandemia. Y una vez más ha vuelto a hacerlo. La presentadora ha posado desde su cama, sin filtros, sin maquillaje y sin peinar, para hacer una clara “declaración de intenciones”.
“Esta soy yo: sin filtros y vergadera”, ha escrito en redes sociales haciendo referencia a la palabra que pronuncia así su hijo Pepe. Tania Llasera ha posado mientras firmaba algunos ejemplares de su nuevo libro ‘La vida a mordiscos’. “Esta foto es una declaración de intenciones. Tengo fotos mejores y podría ponerme filtros, pero creo que es importante reflejar la normalidad en redes”, ha declarado. Y ha recibido cantidad de aplausos por su imagen y sus palabras. “A mí me gustaría ver a más de una de esas ‘tan perfectas’ recién levantadas”, “Eres bella, estás divina” o “Viva la realidad”, han sido algunos de los mensajes que ha recibido.
Esta no es la primera vez que Tania Llasera aboga por mostrar su lado más natural en redes sociales. Además de publicar sin reparo los cambios físicos que experimenta, la presentadora hablaba hace unos meses de la asimetría de su cara. “No puedo ser más asimétrica o tener la nariz más torcida o los dientes menos alineados, hasta el agujero de cicatriz de mi antiguo piercing en el labio de abajo esta mal centrado”, escribía en su cuenta de Instagram. Un alegato, también divertido, en el que terminaba asegurando que a pesar de todas esas imperfecciones, “me gusta mi jeta, me recuerda a mi familia”.
Conocemos mucho de ella, pero no tanto de su marido, que siempre ha querido mantenerse alejado del foco mediático, decisión que ella respeta. Por eso, aunque muchas veces sus fans se lo hayan pedido, Tania Llasera mantiene al margen a Gonzalo Villar. Pero ahora, en forma de anécdota, la presentadora ha querido mostrar por primera vez el rostro de su marido. “Se acabó el anonimato. Pienso que ya es hora de que conozcáis el rostro de mi marido. Es el Niño mayor con cara de pillo de la portada allá por 1982 y el bebote su hermano Chops. Cuando la familia de Rafael era así como en la segunda foto, y los coches modernos así como en la tercera”, escribía la presentadora.