Madrid, barrio de Salamanca. Hace apenas unas horas que el gobierno decretó el estado de alarma en la capital con el fin de contener el virus y frenar la curva de contagios. No se podía salir del perímetro marcado por las autoridades con el objetivo de evitar un pico de movilidad en pleno puente de octubre. Y en redes hubo quejas, muchas, por este denominado 'confinamiento'. Durante el fin de semana, un vídeo comenzó a viralizarse: en él se veía como un grupo de jóvenes (muchísimos más de seis) celebraban una fiesta sin mascarillas en el interior de un local. Y entre ellos estaba Victoria Federica.
En un principio pasó desapercibida la presencia de la sobrina del rey Felipe VI, que horas después protagonizaba el desfile del Día de la Hispanidad junto a la reina Letizia y sus hijas Leonor y Sofía. Todo Twitter analizaba la falta de responsabilidad de ese grupo de jóvenes que bailaba sin respetar las medidas de seguridad, que se movía de un lado a otro del bar a cara descubierta mientras sonaba 'Atrévete' de Yago Roche. "Es otra forma de llevar el estado de alarma y la pandemia", denunciaban con indignación varios usuarios anónimos.
Si nos fijamos bien en el vídeo, al fondo de la sala hay una mesa de DJ en la que en esos momentos se encuentra pinchando Adrián Lozano. Junto a él se encuentra (también sin mascarilla) su compañero de profesión Jorge Bárcenas, al que desde hace unos meses le hemos visto rular por el papel couché desde que inició una relación sentimental con Victoria Federica, que lejos de querer ocultar su presencia en esta polémica celebración compartió varios stories en su perfil privado de Instagram dando fe de lo mucho que disfrutó.
Pero esta no es la única vez que la hija de la infanta Elena y de Jaime de Marichalar copa titulares de este tipo desde que el coronavirus llegó a nuestras vidas. Durante el estricto confinamiento, llegó a llamar "borderline" a la ex de Froilán por ir a "tomarse unos vinos" a casa de una amiga. Una actitud similar a la que, pocos días después, le achacaron cuando se confirmó que había decidido pasar la cuarentena en una amplia villa de lujo ubicada en la provincia de Jaén junto a su novio y un grupo de amigos.