El cambio físico de Vicky Martín Berrocal tras diagnosticarle obesidad: "No era capaz de cruzar las piernas"

Acaba de cumplir 50 años y se siente "muy bien", "mucho más segura" de ella misma y en su "mejor versión". Vicky Martín Berrocal no ha podido tener mejor regalo de cumpleaños que la publicación de un libro en que lleva tiempo trabajando, 'La felicidad ni tiene talla ni tiene edad', un proyecto con el que pone fin a muchos años de lucha contra la obesidad, la enfermedad que le diagnosticaron hace tres años.

Ella misma contó en aquel momento que descubrió que no estaba sana gracias a una analítica. Su primera reacción fue ponerse en manos de especialistas y poner fin a 'dietas milagro' que tenían efecto rebote, cambió de estilo de vida y empezó con hábitos más saludables. En este vídeo puedes escuchar a la exmujer de Manuel Díaz 'El Cordobés', que explica detalladamente cómo ha logrado perder peso y poner fin al "descontrol absoluto" que le había llevado a perder calidad de vida.

En una entrevista concedida a la revista ¡HOLA!, la diseñadora ha ido más allá y ha recordado cuál fue el momento exacto en el que se dio cuenta de que tenía que hacer un cambio en su vida. Fue durante unas vacaciones en el Caribe junto a João Viegas Soares, el empresario portugués con el que mantuvo una relación de cuatro años que terminó el pasado año. "Estábamos en República Dominicana en Fin de Año con mi familia y la suya. Me tumbé en la playa y, cuando quise darme un baño, necesité la mano de mi madre y la de João para levantarme de la hamaca. No era capaz ni de cruzar las piernas", ha contado Berrocal.

Vicky Martín Berroca ha perdido 25 kilos en tres años

En ese momento, Vicky pesaba "casi noventa y seis kilos" y actualmente está en "setenta y dos". En los últimos tres años desde que le diagnosticaron la enfermedad, la diseñadora ha perdido casi veinticinco kilos, algo que ha conseguido gracias a un cambio de alimentación, deporte y hábitos saludables.

Eso sí, en la entrevista al medio citado anteriomente, Berrocal admite que no se siente "segura de sí misma" únicamente por haber trabajado su cuerpo. "He llorado con una talla cuarenta mirándome al espejo y he llorado con una talla cuarenta y seis. No era una cuestión de peso, sino de mente. Eran inseguridades", ha confesado. "Me ha costado cincuenta años sacar mi mejor versión en todo: como madre, como hija, como amiga, como profesional, como mujer…", dice Vicky al cumplir cincuenta años.