Cosméticos y gimnasio: los que sí puedes usar y los que no cuando vas a entrenar

Hay quien se pega madrugones para ir al gimnasio cuando todavía no están puestas las calles, otros, aprovechan el final del día para rematarlo con ejercicio, pero independientemente de cuándo decidas ir al gimnasio, es esencial cuidar adecuadamente tu piel tanto antes como después de entrenar. ¿Te lo habías planteado? Pues que sepas que el sudor que producimos cuando hacemos ejercicios puede obstruir los poros, producir acné o foliculitis, por darte un adelanto. Aunque seguro que hasta este momento no te lo habías planteado, hay mucho que aprender sobre los cosméticos debes usar y cuáles evitar antes y después de ir al gimnasio.

Hay quien pensará que hay que ir a cara lavada y, luego, todas lo sabemos, hay un tanto por cierto bastante importante que no pisa el gimnasio sin su base de maquillaje, su máscara de pestañas, corrector e incluso colorete. Y, como dice el refrán, en el término medio está la virtud.

Antes de tu entrenamiento, lo más importante es mantener la piel hidratada. Con aplicar una crema hidratante podría ser suficiente, ya que este producto ayuda a mantener la barrera cutánea fuerte y evita la pérdida excesiva de humedad provocada por el sudor.

En el caso de que hagas deporte al aire libre, haga o no haga sol, hay que usar una crema con SPF para proteger tu piel de los daños causados por los rayos UV. Además, un producto antioxidante puede aumentar la protección y calmar la piel durante el ejercicio.

¿Y si quiero ir maquillada? Desde lo más profundo de nuestro corazón, mejor no. Lo recomendable es eliminar el maquillaje antes de hacer ejercicio (si tienes mucha prisa, puedes hacerlo con agua micelar). El maquillaje puede desplazarse con el sudor y, al estar la piel alterada mientras haces ejercicio, es mejor no tener sustancias pesadas sobre la piel que puedan congestionar los poros. Y, como consecuencia, pueden aparecer granitos poco agradables.

No todo vale y, en el gimnasio, menos todavía. Aquí menos es más. Si eres de las que está enganchada a la exfoliación (sabemos que es uno de los mejores cosméticos para eliminar las células muertas y dar paso a las nuevas y, por lo tanto, rejuvenecer la piel), antes de ir al gimnasio es mejor que te alejes de los hidroxiácidos. Evita usar exfoliantes, ya sean físicos o químicos, 24 horas antes de hacer ejercicio. Exfoliar puede debilitar la barrera protectora de la piel, y el sudor podría causar irritación y enrojecimiento debido a su pH ácido.

En el caso de que estés retinizando la piel, es decir, adaptándola al retinol y sus derivados, es mejor que no los uses antes de hacer deporte. Aunque las fórmulas de los retinoides son cada vez más estables, bien es cierto pueden hacer que la piel sea más sensible al sol y al sudor, por lo que es mejor usarlos en días que no vayas a hacer deporte.

Después del ejercicio, lo primero que debes hacer es limpiar tu rostro para eliminar el sudor y la grasa que has acumulado. Limpiar la piel es importante después del entrenamiento ya que los restos de sudor, aceite y bacterias pueden obstruir los poros y causar brotes. ¡Y nadie quiere granos gratuitos! Usar un limpiador suave es ideal ya que la piel puede estar más sensible de lo normal. Para una limpieza más profunda, puedes optar por la doble limpieza: primero con un limpiador a base de aceite y luego con uno a base acuosa.

A continuación, y para prevenir la obstrucción de los poros causada por el sudor y la suciedad, los exfoliantes con ácidos como la gluconolactona, ideal para pieles sensibles, serán grandes aliados.

Y, como no, hay que seguir hidratando porque la piel puede estar deshidratada después del ejercicio. Puedes equilibrar la piel con la ayuda de un tónico -si quieres reducir pasos, puedes optar por un tónico exfoliante- o una esencia con ácido hialurónico y, a continuación, seguir con un sérum y una crema hidratante (si es por el día, mejor son protector solar, por la noche, mejor si es nutritiva). 

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